Baraka gana el primer punto a BBVA y Merlin en Madrid Nuevo Norte
El grupo de Trinitario Casanova reclama al banco 713 millones de euros por el supuesto incumplimiento del contrato de la Operación Chamartín
La Justicia madrileña ha admitido a trámite la demanda presentada el pasado octubre por el grupo Baraka, que dirige el empresario Trinitario Casanova, contra BBVA y Distrito Castellana Norte (DCN) por un supuesto incumplimiento de contrato que asciende a un importe de 713,8 millones de euros.
Esta cantidad correspondería a la pérdida sufrida por el grupo que dirige Casanova tras la «privación» de los derechos de reversión en la expropiación de las estaciones ferroviarias -y sus recintos- de Chamartín y Fuencarral. Además, la demanda de Baraka también alude a la «restitución in natura» de ambas fincas, según han informado fuentes judiciales a la agencia Efe.
Las mismas fuentes han asegurado que será «un procedimiento largo», que se extenderá durante varios meses dependiendo de la disponibilidad de las partes a llegar a un acuerdo. Después de acetar la demanda, la magistrada del juzgado de primera instancia número 40 de Madrid trasladará la demanda y, si las partes demandadas rechazan los argumentos -algo que previsiblmente harán- se fijará la fecha para una vista en el juzgado, como marca el procedimiento.
Según han indicado fuentes de Baraka, el grupo por su parte, ha notificado la admisión de la demanda a KPMG y Deloitte, las auditoras externas, además de al grupo San José y a Merlin Properties, los socios de la entidad Distrito Castellana Norte, con el objetivo de que reflejen los más de 700 millones de euros en sus balances tal y como marca la normativa española.
San José vendió su participación a Merlin
La constructora San José llegó a un acuerdo con Merlin Properties a finales del pasado octubre mediante el cual vendió su participación en DCN. Según informó la compañía a la CNMV, «la contraprestación por la venta de las acciones de DCN ha consistido en un pago en metálico de 168,89 millones de euros» y, además, «en un préstamo otorgado por la sociedad compradora».
Merlin ha estado durante meses interesada en el proyecto. Sin embargo, las conversaciones las mantenía con BBVA, que tiene el otro 75% de DCN. Con esta opeación, la entrada de la socimi en el accionariado de DCN se adjudica un puesto estratégico en un un proyecto que prevé la construcción de unas 10.500 viviendas, además de un centro de negocios y la remodelación de la estación de trenes de Chamartín.