El joven español que se esconde tras el segundo accionista de DIA
Boussard & Gavaudan, la gestora francesa que se ha convertido en el segundo accionista de DIA, tiene a una joven promesa de los fondos entre sus filas
Un nuevo accionista ha irrumpido en el capital de DIA al calor de la opa de Mikhail Fridman. Se trata del fondo francés Boussard & Gavaudan, que desde el pasado viernes no ha dejado de comprar acciones de la cadena de supermercados hasta convertirse en el segundo máximo accionista, solo por detrás de Letterone, el brazo inversor del magnate ruso.
El fondo, domiciliado en Londres, tiene ya más del 3,6% de la compañía. Y, pese a que sus cabezas visibles son sus dos fundadores, Emmanuel Gavaudan y Emmanuel Boussard — fueron calificados por el periódico francés Les Echos como los alumnos de Goldman Sachs—, entre sus filas hay un joven español muy destacado en el mundo de los fondos de inversión.
Su nombre es Rafael Serrano y es responsable de España y de algunos países europeos en Boussard & Gavaudan. Serrano, residente en Londres, fue bautizado el pasado año como una de las “jóvenes promesas en el mundo de la venta de fondos en España”, según la publicación especializada Funds People.
Rafael Serrano y sus compañeros de Boussard & Gavaudan. Fuente: boussard-gavaudan.com
Tras licenciarse por la Universidad Carlos III de Madrid en uno de los mejores grados, dejó España para unirse a Boussard & Gavaudan, en 2015. Antes de su llegada, no obstante, estuvo durante tres meses en Banco Santander, en Madrid, para más tarde saltar a la firma asesora de fusiones y adquisiciones Blackwood Capital Group, a Leonardo & Co. y a Credit Mutuel.
Segundo accionista de DIA en tiempo récord
La irrupción del hedge fund en el capital de DIA se registró el pasado viernes. Fue entonces cuando Boussard & Gavaudan superó por primera vez el porcentaje mínimo requerido por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para estar obligado a aflorar su participación.
Primero, el pasado 8 de marzo, declaró una posición del 1,17%, a través de contratos por diferencia (CFDs) y poco después, el 25 de marzo, notificó que tenía un 3,03% de DIA (el 2,3% de manera directa y un 0,7% a través de instrumentos financieros).
Desde ese momento no dejó de comprar acciones a un precio inferior a lo que Mikhail Fridman ofrece por quedarse con la compañía (0’67 céntimos por acción), por lo que el éxito de la operación, si decide vender, está garantizado.
Ahora mismo Boussard & Gavaudan es ya segundo accionista de DIA, con el 3,6% de las acciones. Solo está por detrás de Letterone (Fridman), que tiene el 29%. Supera así a la Sindicatura de Accionistas de Gregoire Bontoux (ex Carrefour), disuelta el miércoles a cierre de mercado, y al banco suizo Credit Suisse, que tiene el 2,25%.
Su registro en el accionariado de DIA coincidió con la aprobación de la CNMV a la opa de Fridman, que se extenderá previsiblemente hasta el 23 de abril, dentro de 20 días. El magnate ruso debe convencer a Boussard & Gavaudan y a otra gran parte de accionistas para que le vendan sus títulos y pueda así culminar su operación para dominar la cadena de supermercados.
Qué es Boussard & Gavaudan
Boussard & Gavaudan es una gestora poco conocida en España. No obstante, entre todo el rastro que ha dejado por las empresas IBEX españolas destaca su paso por Telefónica. La compañía fue uno de los bajistas que más presión metió a la operadora. En 2017 incrementó su posición corta hasta convertir a la compañía en la mayor inversión bajista de la bolsa española. Mucho antes, en 2009, pasó por otra compañía de telecomunicaciones, Jazztel, donde se convirtió en uno de sus principales bonistas.
Boussard & Gavaudan, fundada en el año 2002, cuenta con 67 empleados y tres oficinas repartidas entre Londres, París y Nueva York. El capital de esta compañía está en manos de sus empleados y su equipo formado por 16 traders y ocho analistas especializados por sector.
Con más de 6.700 millones de dólares en activos bajo gestión, maneja sus inversiones en sociedades radicadas en diferentes países, como Estados Unidos, Francia, Hong Kong y Luxemburgo, así como en el oasis fiscal de la Bailía de Guernsey, tal y como refleja la base de datos del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).