El Gobierno deja sin el botín de los fondos europeos al coche híbrido
El sector y las administraciones autonómicas lamentan que el Ejecutivo no las ha tenido en cuenta para desarrollar el PERTE de la automoción, el primero que se llevará a cabo en España
El presidente del Gobierno, Pédro Sánchez, a su llegada a la presentación del Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia PERTE, para el desarrollo del vehículo eléctrico y conectado, en el Palacio de La Moncloa. EFE/Javier Lizón
El presidente Pedro Sánchez presentó este lunes el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) centrado en la electrificación de la industria española del automóvil. El Ejecutivo aprobará el martes la iniciativa para transformar el sector, pero dejará un gran olvidado: el coche híbrido, que apenas se llevará parte de los fondos europeos destinados a la operación.
Fuentes del sector consultadas por Economía Digital que desde el Ministerio de Industria no escucharon las demandas de incluir al vehículo híbrido en el plan de ayudas. En conversaciones con el departamento, desde varios fabricantes trataron de explicitar que el automóvil híbrido tendría un papel en la transformación tecnológica del mercado, pero no parecieron convencer a la administración.
Además, los coches mixtos también jugarían un papel a la hora de dotar de actividad a la fábrica de baterías que el Ejecutivo proyecta en la Península Ibérica.
Las mismas voces lamentan que la cartera que dirige Reyes Maroto no está por la labor de incentivar este perfil de vehículos. En el plan Moves III la compra de un vehículo híbrido enchufable tiene una subvención inferior a la de un eléctrico puro. Los híbridos no enchufables ni siquiera están incluidos en el plan.
En la presentación del PERTE, el presidente de la patronal de fabricantes Anfac, José Vicente de los Mozos, insistió públicamente en la necesidad de incorporar al coche híbrido en el paquete de ayudas que diseña el Gobierno. Según los últimos datos de la asociación, los automóviles mixtos –entre enchufables y no enchufables– representan en la actualidad el 27% de las ventas en España.
El sector también pide tener voz en el PERTE
El dirigente también pidió tener voz en el diseño del proyecto más allá de las Manifestaciones de Interés (MDI) presentadas a comienzos de año. “Hace falta una gobernanza ágil del proyecto. Es difícil coordinar varios ministerios y agentes económicos, pero sería una cosa lamentable que el PERTE se estancase”, advirtió.
En la misma línea hablaron los proveedores del sector. La presidenta de la patronal Sernauto, María Helena Antolín, lamentó que la asociación no haya podido ni siquiera conocer las bases del PERTE y pidió “rapidez” para arrancar la convocatoria.
Camino al 15% del PIB
A pesar de las dudas de la industria, Pedro Sánchez quiere disparar el peso del sector en la economía española. “El peso de la industria de la automoción en el Producto Interior Bruto (PIB) español para 2030 crecerá hasta el 15% –hoy es el 11%–; por cada puesto en una fábrica de coches que creemos gracias a la transformación que está en marcha se crearán otros cuatro en el sector de los componentes”, destacó el líder socialista.
Cuenta para ello con 4.295 millones de euros procedentes de los fondos europeos Next Generation EU. “Se trata de un volumen de inversión pública gigante e histórico”, zanjó. Según sus cálculos, el efecto multiplicador del gasto llegará a tener un impacto de 19.000 millones entre 2021 y 2023.
El presidente se centró en convencer a fabricantes y consumidores de que el coche eléctrico va a dejar de ser visto como un transporte caro y con dificultades para ser cargado. “Va a dejar de ser así, vamos a disponer de 1.000 millones para incentivar la compra de coches de cero emisiones y otros 1.000 millones para crear una red de hasta 100.000 cargadores repartidos por la geografía española”, prometió.
