El fraude del expresidente de Nissan es mayor del previsto
Las autoridades niponas cifran ahora en hasta 62,5 millones de euros las irregularidades fiscales de Carlos Ghosn entre 2010 y 2017
Nuevos datos del caso de fraude fiscal de Carlos Ghosn dan a entender que las irregularidades fueron mayores de las pensadas inicialmente. El ejecutivo fue cesado como presidente de Nissan Motor el jueves por sospechas sobre sus ingresos en 2010 y 2014, pero el equipo que investiga el caso dice ahora que el desfalco también se dio entre 2014 y 2017.
Las primeras informaciones cifraban en hasta 38 millones de euros las infracciones de Ghosn, pero fuentes cercanas a la investigación revelaron este sábado que la supuesta infravaloración de su sueldo ante el regulador bursátil de Tokio aumenta hasta unos 62,5 millones de euros (8.000 millones de yenes), comprendiendo el periodo entre 2010 y 2017.
El equipo de investigación sospecha que las ganancias de Ghosn reflejadas en los informes de los últimos tres años también habrían sido alteradas, informó el diario japonés Asahi. El empresario habría hecho que su remuneración pareciera menor para evitar las críticas de los accionistas de Nissan, agregó el rotativo.
Ghosn permanecerá en prisión al menos hasta el 30 de noviembre
Nissan limita sus declaraciones públicas sobre el caso, pero en una carta a los empleados firmada por el consejero delegado Hiroto Saikawa, la empresa advirtió de que «lo que encontramos en nuestra investigación interna es intolerable«. «Los expertos a los que preguntamos nos dijeron que las conclusiones del informe son en gran medida suficientes para justificar el despido», dijo.
Por el momento, la fiscalía de la capital japonesa mantendrá a Ghosn detenido hasta el 30 de noviembre y, después, puede solicitar otro periodo de 10 días más mientras la investigación siga en curso. Los fiscales estudian presentar otra orden de arresto por el hallazgo de la nueva vulneración de instrumentos financieros nipona, que conlleva penas de hasta 10 años de prisión y multas de 80.000 euros.
«Durante muchos años», Ghosn y otro directivo de Nissan, Greg Kelly (que también está detenido), reportaron a las autoridades bursátiles ingresos «menores a las cifras reales», lee la comunicación del fabricante al regulador bursátil, enviada después de una investigación interna. También «se descubrieron otros numerosos actos de malas conductas» de Ghosn.
Por su parte, Kelly defendió que el salario de Ghosn fue «adecuadamente» determinado y gestionado. «No solo seguía las órdenes del presidente, sino que trabajaba pr el bien de la compañía», aseguró el ejecutivo detenido por su supuesta implicación en las irregularidades fiscales.