El empresario avalado por Soria vuelve a ser el amo del catering en Canarias
El dueño de la extinta Vanyera 3, empresa para la que trabajó la mujer del ministro, regresa al mismo negocio tras una quiebra estrepitosa
Ángel Marrero fue uno de los empresarios más prósperos de Canarias. Su empresa, la hoy extinta Vanyera 3, llegó a controlar el 80% del mercado del catering en Canarias, sirvió en los grandes hoteles, los colegios y en las bodas más concurridas del archipiélago. Vanyera 3 llegó a tener más de 1.000 empleados y tejió una importante red de contactos y clientes.
Pero una de las potencias empresariales de Canarias se vino abajo en los años previos a la crisis y en el primer concurso de acreedores la empresa contrató a la mujer del ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, como procuradora. María del Carmen Benítez López fue la encargada de gestionar el proceso en los tribunales en 2006.
Un año después, el entonces vicepresidente del Gobierno canario, José Manuel Soria, firmó el aval a la empresa con 5,2 millones procedentes de las arcas públicas como garantía en un crédito concedido por CajaCanarias, hoy Caixabank. El aval nunca fue registrado, tal como exigía el procedimiento, y el Gobierno canario tuvo que pagar más de 5,2 millones de euros en los tribunales el 2013.
Deuda millonaria
Tras varios intentos de recuperación, Vanyera se vio abocada al cierre y dejó sin pagar a los proveedores que hoy intentan cobrar en los tribunales. José Luis Batista, propietario de la empresa Domijocar, proveedor de pescado de la antigua Vanyera 3, cuenta que la extinta empresa le pidió continuar con el suministro de pescado pese a los retrasos. Accedió y ahora está arruinado.
«Me prometieron que me pagarían y me rogaron que les continuara dando mercancía. Así lo hice y me dejaron en la ruina. Me deben más de 600.000 euros», explica el afectado.
La nueva empresa
Marrero ayudó a su hijo Borja a montar una nueva empresa. Boanva trabaja en el mismo sector y se dedica al mismo negocio que Vanyera 3. Ángel Marrero tuvo el 1% de las acciones de la empresa pero las vendió el año pasado a su hijo Borja, según ha explicado a este diario.
«Mi padre no tiene nada que ver con esta empresa que monté yo, sin ayuda financiera de mi padre ni de nadie. Yo tengo derecho a hacer mi propia carrera al margen de lo que haya pasado con Vanyera. Tuvo el 1% de la empresa porque era el apoderado mientras estuve viviendo en México», explica Borja, que ha trabajado con chefs de renombre como Ferran Adrià y que también gestionó un restaurante en una zona exclusiva de Ciudad de México.
Resurgimiento
Ahora, el antiguo dueño de Vanyera 3 vuelve a gozar de una importante participación el mercado de catering en Canarias. La empresa de su hijo cuenta con casi un centenar de empleados y ha logrado contratos destacados como el servicio de comida en el Mundial de Baloncesto celebrado el año pasado en España. La familia Marrero niega que la nueva empresa haya sido levantada con fondos procedentes de Vanyera 3, tal como sospechan algunos acreedores y proveedores afectados. «Comencé con apenas un local alquilado y sin ningún tipo de ayuda financiera», explica Borja.
Pero algunos proveedores temen que la empresa del hijo sufra los mismos problemas que la del padre y exigen el pago inmediato de las facturas, según han explicado fuentes cercanas a la compañía. Borja Marrero, propietario de la nueva empresa de catering, asegura que su padre, que se ha declarado insolvente, sólo se ha limitado a asesorar en el negocio y a conseguir clientes debido a los buenos contactos que mantiene en el sector. Rechaza las acusaciones y asegura que los ataques a su nueva empresa son «producto de la envidia».