El Corte Inglés logra un 100% de adhesión al ERE para 3.292 personas
Parte de la plantilla denunció presiones y amenazas para inscribirse como voluntario en el ajuste. El éxito de la convocatoria fue mayor en los centros comerciales que en las oficinas
Tras un mes con la convocatoria abierta, El Corte Inglés cerró este viernes el periodo de adscripción al expediente de regulación de empleo (ERE) que presentó en febrero para 3.292 personas. La compañía abrió un plazo de un mes para voluntarios que ha llenado el cupo al que aspiraba. No sin polémica: parte de la plantilla denunció amenazas y coacciones que se apuntase al plan de despidos.
Aunque los grandes almacenes oficializarán las cifras el lunes, fuentes internas explican que el volumen de adhesión superará “con creces” las 3.292 plazas previstas.
Ahora la empresa deberá estudiar las peticiones. Una vez sellada la lista, El Corte Inglés deberá afrontar la reorganización interna necesaria para equilibrar su nueva estructura a las bajas. Según explican las fuentes consultadas, la demanda de voluntarios en centro comerciales superó la oferta. No sucedió lo mismo en las oficinas, donde apenas hubo interesados en el plan de ajuste.
El número de adhesiones aceleró a medida que avanzaba el plazo. A falta de 10 días, apenas había un 54% de voluntarios mientras que el pasado lunes la organización ya informó al comité de empresa de que el 86% de las plazas ya estaban cubiertas.
En la búsqueda de voluntarios para cumplir los objetivos, algunos directivos El Corte Inglés recurrieron a amenazas y presiones, denuncian varios trabajadores. Desde “sobra uno de los nueve que sois en el departamento” a “espero que solicites tu salida voluntaria” o incluso “ya te irás como forzoso”, fueron algunas de las frases que se escucharon a lo largo de las últimas semanas.
Los sindicatos garantizan que los traslados con los que amenazan algunos dirigentes al personal no se producirán
Como explicó este medio, hubo mandos que reunieron a sus equipos para comunicarles el excedente existente en la sección o directamente se les contactó a través del departamento de Recursos Humanos. En los últimos días, varias trabajadoras se pusieron en contacto con Economía Digital para denunciar que la sugerencia de acogerse al ERE fue especialmente agresiva con las mujeres con reducción de jornada.
Pero más allá de la amenaza de llenar el ERE con despidos forzosos, la compañía cuenta con un as bajo la manga a la hora de ejercer presión sobre los empleados que rechacen la propuesta. En el acuerdo del despido colectivo, la compañía logró incluir una cláusula para trasladar o cambiar de funciones a sus asalariados a cambio de un único pago de 5.000 euros.
Fuentes sindicales aseguran que a pesar de que la movilidad haya sido utilizada como presión por algunos mandos intermedios, no se producirán traslados a centros comerciales de otras comunidades. «Todos los cambios que existan se producirán dentro de unos parámetros razonables de cercanía. Lo de los 5.000 euros es una cláusula habitual en este tipo de negociaciones», aseguran.
Las condiciones del ERE de El Corte Inglés
A finales de marzo, El Corte Inglés selló con los sindicatos el expediente de regulación de empleo (ERE) que presentó la última semana de febrero. Tras varias reuniones, la compañía aceptó las demandas de los sindicatos y elevó la oferta hasta los 33 días por año trabajado hasta un máximo de 24 mensualidades. La cifra final de empleados que la compañía pretende afectar es de 3.292.
La empresa también admitió elevar el pago de las primas a aquellos que se acojan voluntariamente al plan. Los que hayan trabajado entre 5 y 10 años en la empresa recibirán el 5% de su salario bruto. La cifra subirá hasta el 10% para los que tengan entre 10 y 15 años de antigüedad y al 20% para los que superen los 15 años en la firma.
Otra de las metas alcanzadas por los representantes de la plantilla es que se pueda adscribir al ERE todo el personal; no solo el de los centros y áreas afectadas por la restructuración. Además, El Corte Inglés contratará a LHH y Manpower para que dirijan el plan de recolocación de plantilla. Aseguran más del 85% de éxito.