El carnicero de Mercadona la lía al hablar de cerdos que pueden comer ratas
El presidente de Incarlopsa crea una nueva crisis en el sector cárnico al asegurar que la cría de cerdos en las dehesas “es una guarrería”
Emilio Loriente, conocido en los medios como ‘el carnicero de Mercadona’ y uno de los principales productores cárnicos de España, ha generado una nueva crisis en el sector del cerdo con unas polémicas declaraciones. Loriente, un empresario que factura más de 600 millones de euros anuales por los jamones, las carnes y las salchichas que vende en exclusiva a Mercadona, ha destapado la caja de los truenos con unas afirmaciones poco tranquilizadoras.
Después de la polémica generada por la emisión del programa Stranger Pigs, de Salvados, en el que se mostraban cerdos deformes, con tumores y en un estado de salud lamentable, el presidente de Incarlopsa, uno de los grandes proveedores de Mercadona, defendió la producción porcina en granjas (cría intensiva) frente a la cría de cerdos en el campo (cría extensiva).
Loriente aseguró que la cría de cerdos en la dehesa “está muy bien vista pero es una guarrería”. “Está mucho más controlada la ganadería intensiva. Hemos hecho pruebas de todo tipo. Y del cerdo, lo bueno es lo que come. Si le das un buen pienso hay control y está mejor que en el campo comiendo lo que se pueda: una rata, un pájaro”, declaró el empresario a Eldiario.es.
Con esta declaración, el empresario millonario, uno de los artífices de la fortuna levantada por la familia Loriente Piqueras, quería defender al cerdo de granja, pero terminó atacando a los ganaderos que crían cerdos en el campo, incluidos los ibéricos de bellota.
Las consecuencias en Mercadona
Las declaraciones han tenido consecuencias en su principal cliente, Mercadona, del que depende el 80% de su facturación anual, es decir, unos 500 millones de euros. Un consumidor llamó al servicio de sugerencias de Mercadona para quejarse por las declaraciones del presidente de Incarlopsa, según ha podido saber este diario.
Apenas una hora después, el propio presidente, Emilio Loriente, llamaba al consumidor con su móvil personal para explicar que no se entendieron bien sus palabras ni contexto de su declaración.
Este diario se ha puesto en contacto con Loriente, que aseguró que sus declaraciones habían sido “mal interpretadas” y avanzó que la compañía haría pública su posicionamiento tras sus declaraciones.
El proveedor de Mercadona corrige a su propio presidente y asegura que es casi imposible que un cerdo de campo coma ratas
El director de ganadería de la empresas, Julián Redondo, aseguró que el presidente de la empresa se había expresado en un tono “coloquial”. Incarlopsa ahora quita hierro al asunto. ¿Pero qué opinará su principal cliente, Mercadona, que también vende cerdos de campo que, en teoría, también podrían haberse alimentado de pájaros y ratas, tal como asegura uno de sus mayores proveedores? ¿Ha generado malestar en Mercadona? “Yo entiendo que sí”, responde Redondo. “Lo que intentó decir es que la ganadería intensiva tiene todo tipo de controles”, agrega.
Otro alto directivo del grupo, el director de Iceporc, una filial de Incarlopsa, aseguró que el empresario “tuvo conversaciones informales” y “tal vez no fue capaz de expresarse”. “Los cerdos de campo comen lombrices, insectos y bellotas. Pero eso no quiere decir que no haya controles sobre lo que comen. Es difícil, prácticamente imposible, que coman ratas o pájaros” explica.
Los responsables del proveedor de Mercadona también excusan a su presidente al asegurar que su propia empresa comercializa cerdos de campo. Suponen apenas el 5% de su facturación, porque la inmensa mayoría del negocio está en los cerdos criados en granjas, pero esa línea de negocios también queda afectada por las declaraciones del presidente.
Mercadona ha explicado a este diario que no valora las declaraciones de sus proveedores y ha asegurado que no ha llamado a Incarlopsa ni para reñirle, ni para llamarle al orden por sus polémicas declaraciones. Icarlopsa anunció que hará un comunicado público para matizar las declaraciones de su presidente.