Las fábricas de Renault en España aspiran a trabajar cada sábado hasta fin de año
Las plantas de Valladolid y Palencia vuelven a niveles previos a la pandemia y confían en escapar del plan de ajuste que la firma gala tiene en marcha
El nuevo Captur llena la fábrica de Renault en Valladolid. La mayor planta de la firma francesa en España y su homóloga en Palencia ya trabajan en los mismos niveles que antes de la pandemia desde hace semanas, pero ahora se preparan para dar una nueva vuelta de tuerca a la situación: producir coches los sábados de aquí a final de año.
Fuentes sindicales de Renault explican a Economía Digital que al estar trabajando ya a tres turnos, la planta de Valladolid no puede absorber toda la demanda del lanzamiento del nuevo Renault Captur. Por ello, cuentan con la posibilidad de trabajar todos los fines de semana que restan hasta finales de diciembre.
Desde la empresa matizan que a pesar de existir la posibilidad todavía no está decidido que haya actividad todos los sábados de 2020. Se decidirá según la demanda existente del vehículo.
Sin embargo, sí certifican el éxito que tiene el Captur y que impulsa la actividad en Valladolid. Con un descenso del 13,5% de las ventas en septiembre y del 38,3% en lo que va de año, la debilidad del mercado español es substituida por la fortaleza de países como Francia, Italia y Alemania, comparan en la compañía del rombo.
De este modo, la planta vallisoletana ya trabaja a tres turnos y vuelve a poner a al carretera hasta 1.100 vehículos al día. La cifra se suma a los 900 coches diarios que saca al mercado el centro de Palencia entre Renault Kadjar y Renault Mégane en sus dos turnos de actividad.
El convenio colectivo de Renault, en juego
A pesar de las buenas sensaciones, los sindicatos no cantan victoria. “Hay que recordar que el convenio de Renault España está vigente hasta el 31 de diciembre, por lo que en breve nos sentaremos a negociar uno nuevo bajo la sombra de un plan de ahorro de 2.000 millones de ahorro”, advierten fuentes del comité de empresa. “Una vez más, intentarán rebajar la partida de gasto a partir de recortes salariales”, auguran. Y zanjan: “no es hora de celebraciones”.
Eso sí: Valladolid y Palencia salieron bien paradas del nubarrón que enfrentaron en primavera. Entonces, Renault presentó su plan global para reducir su capacidad en un 20% y eliminar 14.600 empleos. Las dos instalaciones respiran, por ahora, ya que la dirección aseguró que los puestos de trabajo en España no peligran, pero asumen que el contexto de recortes les terminará por afectar.
El plan pretende reducir el gasto del gigante de la automoción francés en 2.000 millones anuales. A pesar de que no se descarta que se aplique algún plan de bajas voluntarias en España, la intención es mantener el volumen actual. “No hay intención de reducir la capacidad de producción en España”, aseguró la consejera delegada interina, Clotilde Delbos, reemplazada en julio por el italiano Luca De Meo.
El plan de la firma gala a nivel mundial estudia el cierre de tres de sus 24 fábricas en Francia. El grupo pretende reducir la estructura anual de costes, que afectará al 8% de su plantilla global y se escalonará en tres años.