El Automobile de Barcelona se aplaza a septiembre por la crisis mundial de chips
Los organizadores del evento internacional de automoción esperan que en otoño la crisis por la escasez de semiconductores haya aminorado
La crisis mundial de chips sigue provocando estragos en la industria del automóvil. Los organizadores del salón internacional Automobile Barcelona han decidido postergar casi tres meses la celebración de su edición de 2021 para ubicarla en septiembre. El objetivo es poder reunir a las grandes marcas del sector en un momento más favorable que el actual.
La cita debía arrancar el próximo 8 de julio y cerrarse el 18 del mismo mes, pero los responsables han optado por trasladar la inauguración de la 41ª edición hasta el 30 de septiembre.
El cambio de calendario persigue celebrar el encuentro en un momento en el que la industria ya no está sufriendo de una manera tan intensa la escasez internacional de semiconductores que ha puesto en jaque la producción de vehículos.
El presidente de Automobile Barcelona, Enrique Lacalle, se ha mostrado confiado en que la modificación sirva como impulso para la industria del automóvil en un contexto más favorable. «Con el cambio de fechas buscamos garantizar nuestro papel como gran escaparate internacional de la automoción e impulsor de las ventas tras un periodo muy complejo», ha explicado en un comunicado.
La industria del automóvil espera la recuperación para finales de año
La industria del automóvil espera recuperarse a finales de año de esta crisis de suministros. Las plantas de Renault, Stellantis, Ford u Opel se han visto resentidas en los últimos meses por este fenómeno.
La dirección de Opel prescindió de 300 trabajadores temporales de su fábrica de Figueruelas (Zaragoza) debido a la imposibilidad de mantener en marcha todos los turnos de la cadena de fabricación de los modelos Crossland y Aircross.
Los organizadores del Automobile se han alineado con las empresas del sector y esperan que el encuentro les permita mejorar su situación en otoño. «Será un impulso definitivo al mercado por la mejor situación económica y social, y porque se habrá estabilizado más la crisis de los semiconductores», han argumentado.
Se trata de uno de los grandes eventos del sector de la automoción a nivel internacional. La edición de 2019, la última que tuvo lugar antes de que se desatase la pandemia de coronavirus, llegó a concentrar hasta 800.000 visitantes en las instalaciones de la capital catalana. Este año, la temática se volcará con los procesos de digitalización y descarbonización que están afectando a la industria.