Disney se hace con Fox (y Netflix tiembla)
Los accionistas acuerdan que Disney compre Fox por 61.000 millones de euros, creando un imperio del entretenimiento sin precedentes
Netflix ha hecho sonar sus alarmas: la fusión que más temía terminará por consumarse. Los accionistas del grupo Walt Disney y de la 21st Century Fox han aprobado finalmente el acuerdo de fusión valorado en poco más de 61.000 millones de euros (71.300 millones de dólares).
Después de muchos meses de rumores, las empresas acordaron que Disney se haga con una buena parte del negocio de Fox. Aunque la fusión aún debe ser aprobada por los reguladores de otros países, ya fue admitida por las autoridades estadounidenses, una de sus principales trabas.
Esta puede terminar siendo una de las peores noticias para Netflix, además de suponer un cambio trascendente en la industria del entretenimiento, con una concentración de capital por parte de Disney que la convertirá en un imperio del cine, la televisión y muy probablemente el streaming.
Disney, el Goliat del entretenimiento, listo para combatir a Netflix
Desde que los rumores de la adquisición empezaron a circular, los analistas del mercado siempre afirmaron que Disney tiene el propósito de ponerse al mejor nivel posible para empezar a dar la batalla a Netflix y Amazon en el espectro digital.
La empresa ya tiene un portal de streaming, pero con esta compra puede agregar algunos de los títulos más taquilleros y populares a su oferta. Su plataforma no está disponible en todo el mundo y una de las posibilidades más comentadas es que un producto mucho más completo llegará al mercado después de la compra de Fox.
No es sencillo explicar la magnitud de esta transacción. Disney ahora será dueña de todos los canales de National Geographic, Fox News y la cadena FX, una de las más populares de EEUU.
Avatar, El planeta de los simios, Los Simpson, los Hombres X y Alien son tan solo seis de las cientas de franquicias que pasarán a sus dominios.
Disney pasará a poseer todo el universo cinematográfico de Marvel
Incluso Black Mirror, una de las series más demandadas en Netflix, es propiedad de Fox (y ahora Disney) en un 50%, por lo que su futuro en la principal plataforma de streaming (hasta ahora) es incierto. De hecho, desde antes de la compra, Disney anunció que dejará de vender licencias a Netflix a finales de 2019.
Todo esto sin siquiera mencionar que la nueva súpercompañía será dueña del universo cinematográfico de Marvel, la franquicia de Star Wars, la cadena británica Sky y dos terceras partes de Hulu, otra plataforma de streaming que recién superó los 20 millones de suscriptores (aunque sigue lejos de los 130 millones de Netflix).
«Estamos increíblemente satisfechos de que los accionistas de las dos compañías nos hayan dado aprobación para continuar y estamos seguros de nuestra capacidad para crear valor a largo plazo con esta adquisición de los excelentes activos de la Fox», dijo el consejero delegado de Disney, Robert Iger.
Netflix tiembla en uno de sus momentos clave
La fusión ya fue aceptada por el Departamento de Justicia de EEUU. Para ello, Disney accedió a vender 22 cadenas de televisión regionales de deportes para proteger la libre competencia. Tras la aprobación de la operación, los títulos en Wall Street de Disney retrocedían en torno a un 1% y los de Fox un 0,5%.
La caída de Netflix en bolsa, por su parte, superó el 2%. La plataforma de streaming decepcionó a los accionistas a mediados de mes cuando presentó sus resultados trimestrales y reveló que había sumado un millón de suscriptores menos de los esperados, alcanzando «apenas» 5,15 millones de nuevos clientes.