DIA sigue en el pozo: más pérdidas y menos ingresos
La cadena de supermercados reconoce que continúa en una situación difícil y no mejora ninguno de sus vitales
DIA sigue todavía esperando a poder dar buenas noticias. Hasta entonces, sus resultados anuales siguen la tendencia de los trimestres anteriores en los que aumentan las pérdidas y no remontan las ventas.
Las pérdidas de DIA ha duplicado pérdidas respecto al mismo periodo del año anterior, hasta alcanzar los 790,5 millones de euros en rojos; las ventas se han reducido en un 9,3%, situándose en los 6.870,5 millones de euros.
La compañía, que reconoce que atraviesa un momento complicado, señala como responsable del resultado al cierre de 861 tiendas a lo largo del año, lo que dejó el parque total de supermercados en 6.626 tiendas.
DIA, por su parte, indica que ve los primeros síntomas de la recuperación en de las ventas comparables (Like-for-Like), que descendió un 7,6% en el año 2019, pero, dice, en número de clientes ha permanecido prácticamente sin cambios (-0,7%), lo que demuestra «la formidable resiliencia de nuestra base de consumidores y la fortaleza fundamental del formato de proximidad».
Otro factor que marcó el resultado de DIA fue el proceso de reconversión de franquicias, afectó a un total de 385 tiendas durante 2019, sobre todo en España y Brasil. Esta dinámica se tradujo en un aumento de los gastos laborales y operativos, así como en el reconocimiento de provisiones adicionales en cuentas a cobrar relacionadas.
La compañía, que está controlada desde el pasado año por el magnate ruso Mikhail Fridman, acaba de presentar sus resultados de enero a diciembre ante la Comisión Nacional de Mercado (CNMV), después de cuatro trimestres de vaivenes, en los que se ha llevado a cabo una ampliación de capital vital para la supervivencia, el ERE de Max Descuento, el cierre de algunos formatos de franquicias y la firma de un nuevo convenio colectivo.
Ningún país se salva en DIA
Además de España, DIA tiene su negocio focalizado en Argentina, Portugal y Brasil, siendo este último el segundo más importante para la compañía, después del mercado nacional.
En Argentina, las ventas brutas disminuyeron un 45,2% (en moneda local) hasta los 1.540,5 millones de euros, si bien la caída fue de un 7.5% en divisa constante. Allí, dice la compañía, el entorno es complicado por el fuerte descenso del consumo privado a causa de un repunte de la inflación y la fuerte depreciación de la moneda.
Los cuatro países de DIA (Brasil, España, Argentina y Portugal) redujeron ventas
En Brasil, las ventas brutas cayeron un 18% hasta los 1.344,0 millones de euros (descendieron el 15,6% en moneda local). Las ventas comparables se redujeron en un 8,8%.
Y en Portugal, de acuerdo a la información presentada, las ventas brutas se redujeron un 7,3% en 2019 hasta los 767,9 millones de euros, mientras que las ventas netas descendieron un 7,9% durante el mismo período del año anterior.
Disputa con Eroski
Por si fuera poco, en el informe anual de resultados de DIA, divulgado este jueves, se revela cuánto reclama a Eroski por la decisión de acabar con la central de compras conjunta Red Libra, una sociedad que apenas estuvo operativa un año, entre 2017 y 2018. El conflicto se dirimirá en la Corte Civil y Mercantil de Arbitraje de España (CIMA) y la cantidad en disputa oscila entre 40 y 60 millones de euros de indemnización.
Desde DIA consideran que la decisión de resolver el acuerdo alcanzado para crear la sociedad por parte del grupo vasco fue un acto «de mala fe contractual», por lo que exige una compensación de 40 millones de euros. Eroski, por su parte, argumenta que también ha sido perjudicada por un «incumplimiento del contrato» firmado con DIA, y reclama por ello 59,8 millones de euros.
Los responsables de DIA apuntan a que no ven «probable» que el proceso tenga «consecuencias negativas» para la compañía, y se han limitado a precisar que el arbitraje se encuentra todavía «en una etapa temprana».