Damm y la banca piden al juez que los blinde ante otros acreedores de Pescanova
Quieren que las "modificaciones estructurales" en la matriz y sus filiales no lleven aparejado “derecho individual de oposición”
El futuro de la nueva Pescanova, si el juez aprueba la propuesta de convenio presentada este lunes, estará controlado en todo momento por la cervecera Damm de Demetrio Carceller y la banca española. De hecho, en su propuesta incluso tratan de blindarse ante los otros acreedores de la multinacional pesquera.
El peaje ineludible de la propuesta de convenio presentada por Damm y Luxempart en asociación con la banca pasa por llevar a la suspensión de pagos o concuso exprés, como ellos mismos lo denominan, a todas las filiales españolas del grupo. El siguiente paso será su segregación en la sociedad limitada Nueva Pescanova, (todas excepto Novapesca Trading) que agrupará pasivo y participaciones de la futura Pescanova España SL.
Las filiales españolas que sufrirán el concurso exprés, en caso de que el convenio salga adelante, son 12: Pescafina, Novapesca Trading, Insuiña, Frigodis, Frinova, Bajamar Séptima, Pescafresca, Lafonia Sea Foods, Fricatamar, Frivipesca Chapela, Pescanova Alimentación y Pescafina Bacalao. La propuesta de Damm y la banca plantea para ellas quitas que van desde el 48% hasta el 99,9%, con preferencia de condonación de deuda en los bancos.
Derecho de oposición a la fusión
Los promotores de la propuesta híbrida de convenio buscan blindarse, no obstante, ante los otros acreedores de la actual Pescanova, según se recoge en la documentación remitida al juzgado. Explican que al realizarse dichas modificaciones estructurales en la actual Pescanova y sus filiales “como contenido de un convenio de acreedores concursal”, las mismas “no llevarán aparejado derecho individual de oposición de los acreedores concursales de Pescanova”.
El artículo 44 de la Ley de Modificaciones Estructurales indica que los acreedores tendrán un mes para oponerse a una fusión hasta que se le garanticen los créditos, siempre que estos “hubiesen nacido antes de la inserción del proyecto de fusión en la web de la sociedad o en el Registro Mercantil”. No obstante, tanto Damm como la banca explican al juez que “el principio mayoritario que rige este convenio en sede concursal quedaría frustrado por dicho derecho individual de oposición”. Se apoyan además en una sentencia de febrero del año pasado en el Mercantil número 4 de Madrid que niega el derecho de oposición en dos sociedades concursadas, aprobados sus respectivos convenios, así como en la llamada regla de concurrencia en los procesos de suspensión de pagos.
Damm y Luxempart, con derecho de veto
En la nueva Pescanova que surja tras el convenio –si este es aprobado– no hay duda del poder que tendrá Damm, aún a pesar de que será socio minoritario con un 30% de las acciones frente al 60% de la banca acreedora española. No obstante, los de Demetrio Carceller tendrán derecho de veto sobre “los cambios materiales en la financiación de la deuda y del capital de las filiales de Nueva Pescanova, la creación de nuevas participaciones o la emisión de nuevas acciones e instrumentos de capital”. El veto también será aplicable sobre la entrada de nuevos accionistas.
Los concursos en las filiales españolas de Pescanova son la piedra angular de esta propuesta de convenio. “La reestructuración resulta de gran importancia para maximizar las posibilidades de que el convenio no resulte a la postre incumplido”, indican. Damm y la banca piden que el convenio se lleve adelante a expensas de que las filiales vayan abordando su proceso de reestructuración. “Solicitamos que se permita condicionar la eficacia del presente convenio a la reestructuración extra concursal de las filiales españolas”.
Carceller y su 30% en Nueva Pescanova
Deloitte, en calidad de administrador concursal, se compromete a presentar la solicitud de concurso exprés en las filiales españolas si el juez da el visto bueno al convenio.
La propuesta de financiación es de hasta 150 millones de euros (115 millones son necesidades operativas según el plan de viabilidad). En contraprestación por esa financiación Damm y Luxempart recibirán de Nueva Pescanova una comisión de 6,2 millones que se devengará cuando se formalice el crédito y que servirá para que se hagan con el 30% de las acciones.