D&G trae sus joyas a Barcelona
La tienda de la firma en paseo de Gràcia venderá parte de la colección de alhajas
La tienda de Dolce&Gabanna en paseo de Gràcia (Barcelona) está de estreno. Este sábado, inaugurará un nuevo espacio en la exclusiva boutique en el que se expondrá la nueva colección de relojería. Se trata de piezas de lujo cuyo precio no baja de los 2.039 euros por pieza.
La flagship store de la firma italiana en la capital catalana se había centrado en la venta de ropa tanto de calle como de pasarela. Pero ha querido seguir los pasos de las otras dos tiendas propias que tiene en España (Madrid y Puerto Banús) para sumar sus alhajas a la oferta comercial. La decisión ha bastado para cerrar las puertas de la boutique durante una semana, tiempo en el que se ha reformado el interior del establecimiento.
Relojería de lujo
Fuentes de la compañía han señalado que, por el momento, ofrecerá su colección de relojería para señora, así como la recién estrenada colección masculina, ambas tan sólo disponibles en tiendas de primer nivel.
En 2012, la empresa apostó por la joyería para hombres y presentó 52 modelos no aptos para todos los bolsillos. La colección cuenta con tres gamas: la clásica DG7, con una pulsera de cadena de malla de Milán; la deportiva DS5, diseñada con cronómetros y la exclusiva línea DG7 Gems, con esmeraldas, rubíes, zafiros y diamantes.
La línea femenina también juega con el lujo y las piedras preciosas. Hay modelos que rozan los 6.000 euros por unidad. Piezas suntuosas que desde este sábado también se expondrán en la boutique catalana.
El ‘glamour’ de paseo de Gràcia
Así, Dolce&Gabanna se suma a otras grandes firmas de la haute couture que en los últimos meses han puesto el foco en paseo de Gràcia. La artería del lujo catalán vive un momento tan glamuroso como dulce. Las carteras de americanos, ingleses, franceses, alemanes, rusos y chinos han encumbrado la avenida en una vía de lujo a nivel internacional.
Chanel, Hermès, Carolina Herrera y Loewe ocupan algunos escaparates. A ellas se han sumado en septiembre la nueva tienda de Prada, de 1.600 metros cuadrados y la de Louis Vuitton, de 1.500 metros cuadrados. La próxima en ampliar su presencia será la catalana Rabat. La joyería prevé inaugurar una macrotienda de 2.000 metros cuadrados que se posicionará como el buque insignia de la joyería.