Cuatrecasas negocia con Hacienda para evitar la cárcel
El prestigioso abogado está acusado de nueve delitos fiscales por valor de 3,7 millones
Los abogados de Emilio Cuatrecasas han iniciado las negociaciones con Hacienda para tratar de zanjar con un acuerdo de conformidad la causa penal que recae sobre su cliente. La estrategia llega después de que la defensa del prestigioso abogado lo haya intentado todo en el proceso. Con el juicio cerca, quieren curarse en salud. El notable de la sociedad civil catalana se enfrente a nueve delitos fiscales por valor de 3,7 millones de euros, por lo que una condena podría implicar más de 20 años de prisión.
Los primeros contactos no han fructificado, según fuentes cercanas a las negociaciones. El problema reside en que los letrados de Cuatrecasas se resisten a pagar las cantidades exigidas por la Agencia Tributaria. Además de los 3,7 millones de euros, ya depositados como responsabilidad civil, el letrado debe asumir una multa del 65% de la cantidad defraudada y los correspondientes intereses. Las citadas fuentes comentan que también se le exigen otras cantidades de otros ejercicios fiscales.
Una partida que estuvo casi ganada
Cuatrecasas estuvo a punto de librarse de la causa. El juzgado de instrucción número 32 dio carpetazo al caso en noviembre de 2012 y, tras verse obligado a reabrirlo por la insistencia de la Fiscalía, decidió archivar ocho de los nueve delitos fiscales y cerrar la instrucción en noviembre de 2013 con una sola acusación. De nuevo, se recurrió a la Audiencia, que volvió a restablecer la acusación inicial.
La querella original, presentada a finales de 2011, por el Ministerio Público señala que Cuatrecasas defraudó el IVA y el IRPF del 2006, 2007 y 2008; el impuesto de sociedades del 2006; y el Impuesto sobre el Patrimonio del 2006 y 2007. El escrito indica que el famoso letrado creó «una sucesión de negocios simulados» para aparentar que su patrimonio se hallaba «afecta a una actividad económica». El imputado, según la acusación, incluyó como gastos de una actividad empresarial los generados por sus viviendas, barco de recreo, mobiliario, viajes y otros dispendio.
¿El caso pasa factura?
Cuatrecasas abandonó a mediados del año pasado la presidencia de su despacho, el segundo más grande de España. Cedió el testigo a su hasta por aquel entonces consejero delegado Rafael Fontana y quedó únicamente vinculado a la empresa como socio.
La firma redujo el cambio a una transición natural. Fontana se había consolidado como hombre fuerte de la casa y, por tanto, era la persona idónea para tomar el relevo. No obstante, el movimiento también fue vinculado a la situación legal del abogado, imputado desde hacía tres años por materia fiscal, una de las especialidades de la compañía.
Resolución del caso
Los abogados de Cuatrecasas intentarán sellar la conformidad en los próximos meses. Si se tiene en cuenta los precedentes de los últimos años, el abogado acabará pagando lo exigido por el Fisco. Una vez se tenga el visto bueno de la Abogacía del Estado, se negociará con la Fiscalía de Delitos Económicos de Barcelona. Probablemente, se pacte una pena mínima que no comporte prisión.
Al menos, ese es el guión que se ha seguido en otros casos como el de Montserrat Caballé o la familia Carulla. No obstante, siempre pueden haber complicaciones, como es la situación de Leo Messi, donde la Abogacía del Estado exige que se juzgue al delantero azulgrana pese a que el Ministerio Público considera que la culpabilidad la debe asumir únicamente el padre y agente del astro argentino.