Cepsa engorda la cifra de ERTE: suma 2.500 empleados de sus estaciones
La petrolera confirma el despido temporal de más de la mitad de la plantilla de su filial Cedipsa, que se turnará para no trabajar hasta el 31 de octubre
La petrolera Cepsa ha aplicado un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que afectará a 2.500 empleados de la red de estaciones de servicio de la compañía. Se trata de una de las medidas para amortiguar el impacto económico del coronavirus y que se extenderá hasta el próximo 31 de octubre.
El despido temporal de los trabajadores será rotatorio, es decir, afectará a cerca de 1.200 empleados en dos tandas. Cepsa precisamente ha presentado este lunes los resultados de su anterior ejercicio, en el que ha anunciado pérdidas de 556 millones de euros.
El ERTE, según explica el comunicado de la petrolera, se aplica para proteger la generación de flujo efectivo ante la caída de los precios del petróleo y la reducción de la demanda a consecuencia de la pandemia.
Este mecanismo tiene vigencia desde el pasado 29 de abril y llegará hasta el último día de octubre, como mínimo. No obstante, la intención de la compañía es ir reincorporando a los trabajadores, según fuentes de Cepsa recogidas por Efe.
El ERTE se ha realizado sobre Cedipsa, la filial de la petrolera en la que se integran las 479 estaciones de servicio que gestiona la compañía, más de un tercio del total de 1.500 establecimientos.
Más de la mitad de la plantilla de Cedipsa
Los 2.500 empleados que se verán afectados por el ERTE suponen un gran porcentaje de los 3.196 trabajadores de Cedipsa. Es por ello que no tendrán que estar durante todo el periodo sin trabajar, sino que se realizará por turnos en los que además Cepsa complementará el salario hasta llegar al 100% de la retribución.
El primer trimestre de 2020 le ha supuesto a Cepsa pérdidas de 556 millones de euros frente a los 151 millones de beneficio que obtuvo en el mismo periodo del año pasado. Gran parte de esta caída en las cuentas se debe a una provisión de 350 millones para paliar el menor inventario de crudo y el deterioro de los activos de explotación y producción, que llegará a un valor de 188 millones de euros.