Conthe reúne a la cúpula del Frob para decidir si se abstiene con los sueldos de Caixabank
Caixabank celebra su primera junta de accionistas tras la fusión y el punto más polémicos es el de la remuneración de los consejeros
La comisión rectora del Frob, presidida por Paula Conthe, se reúne esta semana para decidir si se abstienen este viernes durante la junta de accionistas de Caixabank en la votación sobre los salarios del consejo de administración.
El Frob es el segundo accionista de la nueva Caixabank con un 16,1% del capital y aún no ha decidido si votará a favor, en contra o si se abstendrá de los puntos más polémicos de la orden del día, el 12 y el 13, los correspondientes a la modificación y fijación de la remuneración de los consejeros.
El órgano colegiado que tomará la decisión final es la comisión rectora del Frob, en su composición reducida, que está compuesta por representantes del ministerio de Economía, del ministerio de Hacienda y la presidenta, Paula Conthe.
Del primer ministerio asistirán Inés Maria Bardón, secretaria de Estado de Hacienda y Jaime Iglesias, director General de Presupuestos. Del segundo, Amparo López Senovilla, subsecretaria del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital; Carlos San Basilio Pardo, Secretario General del Tesoro y Financiación Internacional; y Julio José Díez Menéndez, director del Servicio Jurídico del Estado.
Caixabank celebra su primera junta de accionistas este viernes tras su fusión con Bankia. En ella se deben aprobar las cuentas anuales, el informe de gestión o la composición del nuevo consejo, entre otros asuntos. Los puntos más polémicos de la orden del día son los relativos a la remuneración de los consejeros.
Y lo son, porque el Gobierno se ha pronunciado en las últimas semanas sobre ello. Sobre todo, la ministra de Economía, Nadia Calviño que ha sido las más crítica con los salarios de la banca en un momento en el que las entidades financieras negocian miles de despidos.
La vicepresidenta segunda del Gobierno considera que los altos sueldos y los bonus pagados a directivos de entidades financieras son “inaceptables” porque se trata de remuneraciones “que no se corresponden con la situación económica del país y aún menos en entidades que anuncian fuertes recortes de personal y cierres de oficinas”.
Durante una videoconferencia con corresponsales extranjeros explicó que el Gobierno ya trabaja con el Banco de España para encontrar formas de controlar estos salarios. Por eso la votación no es sencilla. Si votan a favor de los salarios propuestos en la junta estarían apoyando justo lo que han criticado en los últimos días.
Si se abstiene y el resto de accionistas vota a favor, la votación saldría igualmente adelante aunque su mensaje quedara claro. Así que lo más acorde sería votar en contra de que el nuevo presidente de Caixabank, José Ignacio Goirigolzarri, tenga una remuneración fija de 1,65 millones de euros al año, a la se le puede sumar un bonus de hasta 200.000 euros, por ejemplo.
Santero valoró abstenerse
El nuevo consejo de administración de Caixabank celebró su primera reunión el pasado 30 de marzo y en el encuentro se votaron todos los puntos que van este viernes a la junta, entre ellos, la propuesta de remuneraciones. Uno de los miembros, Teresa Santero, consejera dominical de BFA, “valoró abstenerse respecto al sueldo de Gorigolzarri para mantener el discurso de Calviño”.
Así lo han explicado fuentes cercanas al Gobierno a Economía Digital aunque ni el banco ni ella han informado sobre si finalmente lo hizo pues esta votación es secreta, tal y como recoge la ley de sociedades de capital.
Si finalmente este viernes el Frob no apoya la política de remuneraciones, no sería la primera vez que se abstiene ante alguna votación polémica. Así, en marzo de 2020, cuando era el primer accionista de Bankia con el 61% de su capital se abstuvo en la votación de pagar dividendo, tal y como recomendaba el Banco Central Europeo, lo que permitió que se aprobara.
En la presentación de resultados de Caixabank, el consejero delegado, Gonzalo Gortázar se pronunció sobre el asunto, uniéndose al discurso pronunciado en los últimos días por otros directivos y asegurando que los sueldos de la banca están muy regulados.
“Máximo respeto a la opinión del Gobierno sobre la remuneración de los bancos, pero es bueno recordar como han hecho otros directivos que es tema muy regulado desde la crisis de hace 12 años”. También incidía en que desde el punto de vista de gobierno corporativo está reglamentado, aprobado por los accionistas y con la máxima publicidad.
Pese a ello, aseguraba que Caixabank escucha a todo el mundo, “y más si tiene un papel relevante, como el Gobierno” pero advertía de que luego tomarán decisiones “conforme a los intereses de la entidad”.