La construcción se deja 151.000 puestos de trabajo en marzo

Con solo dos semanas de estado de alarma decretado, el parón de la economía por el coronavirus se ha cebado con la construcción. Los datos de desempleo publicados este jueves revelan que este sector fue el que sufrió un mayor descenso de su actividad y terminó despidiendo a más de 151.000 trabajadores.

Las dramáticas cifras llegan tras la advertencia de la patronal Seopan, que ya señaló los elevados costes que tiene prescindir de este sector (345 millones por día de inactividad. 

El retroceso de la actividad de la construcción (-17,28%) es el más elevado entre todos los sectores, superando a hostelería (-14,27%), actividades administrativas (-8,91%) y educación (-5,24%). La caída en construcción supuso prescindir de más de 151.000 trabajadores, pasando de 899.000 trabajadores a cerca de 738.000.

El de la construcción es un sector que representa el 10% del PIB nacional y los efectos nocivos de su caída pueden extenderse a otros campos, puesto que está muy conectado con el tejido productivo e industrial, al ser el sector con mayor generación de actividad económica inducida.

Con la parálisis total del sector, cuyos efectos todavía están por ver, se estima que, en lo relativo a los contratos de obras, públicos y privados, la hibernación del sistema afecte a cerca de 1.770.000 trabajadores (1.268.600 directos y otros 500.000 indirectos).

Los temores se agravan en el sector al pensar en una prórroga del estado de alarma y, sobre todo, de continuar endureciendo las condiciones de confinamiento. Desde la patronal Seopan criticaron que no se estableciera el pasado domingo un plazo de preaviso alguno desde el Gobierno para advertir de qué actividades eran esenciales.

Las empresas, afirmó Seopan, tuvieron solo «24 horas de prórroga para hacer efectivo el permiso retribuido recuperable en aquellas actividades donde sea imposible realizar una interrupción inmediata de la actividad, como así ocurre en la práctica totalidad de las obras».

El paro alcanza cifras récord

La caída de la construcción es el fiel reflejo de la destrucción de puestos de trabajo que ha vivido España por la crisis sanitaria del coronavirus.  El paro registró una subida récord de 302.365 personas en marzo y el número total de desempleados ascendió hasta los 3,548 millones (escaló un 9%).  

Las cifras de afiliación a la Seguridad Social hablan de una forma mucho más clara del impacto en el empleo. La caída de población empleada se redujo en aproximadamente 834.000 personas. No se trata solo de una cifra sin precedentes, sino de también un repunte que triplica la mayor bajada de la serie histórica.