El concurso para la reindustrialización de Nissan deja el ‘hub’ en el aire
El Consorci de la Zona Franca reserva más de 100.000 metros cuadrados de la fábrica para Silence y Nissan, pero QEV tendrá que negociar con el adjudicatario y competir con otros interesados
Sorpresa en el concurso para la reindustrialización de la fábrica Nissan de la Zona Franca. QEV, la empresa que lidera el hub de la descarbonización, el proyecto que a priori más metros cuadrados y trabajadores tenía que emplear en la planta, no aparece en el concurso. Su presencia final en las instalaciones dependerá de que negocie con el adjudicatario y no haya ofertas mejores por el suelo industrial.
El Consorci de la Zona Franca anunció este jueves la publicación del concurso, que adjudicará 518.000 metros cuadrados de suelo industrial y logístico. Inicialmente estaba previsto que QEV y Silence tuvieran ya un espacio reservado, como las dos mayores empresas de la reindustrialización. Sin embargo, los pliegos del concurso, a los que ha tenido acceso Economía Digital, solo reservan suelo para dos empresas, y ninguna es QEV. Se trata de Silence y Nissan, que mantendrá un centro técnico y de investigación.
Los pliegos establecen que 66.000 metros cuadrados están reservados para el fabricante de motos eléctricas Silence, controlado por Acciona, y otros 38.000 para Nissan Motor Ibérica. Por tanto, más de 100.000 metros cuadrados están fuera del concurso. El adjudicatario, que será un operador inmologístico, será el arrendador del resto del suelo a quien considere, respetando los usos establecidos en el contrato.
Los terrenos, propiedad del Consorci de la Zona Franca, cuentan con dos zonas logísticas, una de 66.000 y otra de 30.000 metros cuadrados, y otra industrial de 310.000 metros cuadrados, además de las zonas reservadas para Silence y Nissan. El operador que gane el concurso decidirá cuantas y qué empresas habrá en las zonas logísticas y la industrial sin ningún otro criterio de que les den los usos previstos.
Fuentes de la mesa para la reindustrialización explicaron que la decisión de excluir a QEV y el resto de empresas del hub de la descarbonización, como BTech, se debe a que no existe un contrato con ellas, como sí tienen Nissan, que ya está instalada, y Silence, que precisamente este viernes 1 de julio tiene ya acceso a los terrenos para empezar a trabajar en la preparación de la planta para poder producir.
La decisión de firmar con el fabricante de motos eléctricas se tomó hace un mes, cuando se demoró el concurso para afinar la letra pequeña. Esta empresa, que está en crecimiento, necesitaba acceder ya al suelo o, de lo contrario, buscaría otro emplazamiento. Sin embargo, el proyecto de QEV, que prevé fabricar hasta cinco modelos de furgonetas y vehículos comerciales eléctricos, está más verde y puede esperar al concurso. Eso sí, no tiene garantizada su presencia en la planta.
Las mismas fuentes admitieron que la empresa que dirige Joan Orús y de la que participa el empresario valenciano Enrique Bañuelos tendrá que negociar con el adjudicatario y competir con otros proyectos industriales interesados. No obstante, en la mesa confían en que QEV pueda estar en la planta, pues han presentado su plan y el concurso establece que las empresas tienen que dedicarse a la movilidad eléctrica. “Con lo que nos ha costado encontrar proyectos, no creo que ahora salgan de debajo de las piedras”, ironizaban.
Sea como sea, la presencia de QEV no está asegurada. Tampoco está claro que la empresa haya cerrado la financiación, algo que a menudo se ha puesto en duda desde la mesa. La presencia de Bañuelos en el accionariado, aunque con una participación minoritaria, ha levantado muchas suspicacias y desconfianza en algunos miembros de la mesa, de la que, además del Consorci, forman parte Nissan, el Govern y los sindicatos.
Los tiempos del concurso
El concurso, publicado este jueves por el Consorci de la Zona Franca, da a las empresas interesadas en licitar hasta el 16 de agosto para presentar ofertas. Se espera que puedan ser operadores con experiencia en logística, y han sonado empresas como Merlin, que gestiona tanto suelo logístico como comercial.
El 1 de septiembre empezará la apertura de los sobres, que finalizará el 15 de ese mismo mes con las ofertas económicas. Los pliegos establecen que el precio mínimo que tendrán que ofertar los interesados será de 24 euros por metro cuadrado al año más IVA, lo que asegura unos ingresos de 12,4 millones al Consorci si está todo alquilado.