Comsa Emte ‘salva’ las cuentas de 2013 por el mercado internacional
La compañía facturó 1.575 millones, el 47% del total en el extranjero, inmersa en un plan de reestructuración
Comsa Emte cierra 2013 con un sabor agridulce. La compañía, que ha acometido un plan de reestructuración tanto de la plantilla como de la deuda, ha facturado el 7,8% menos hasta los 1.575 millones de euros.
El mercado internacional ha sido su principal salvavidas. En el último ejercicio ha representado el 47% del total de los ingresos, hasta alcanzar los 751 millones. La cifra podría superar el 50% en 2014, año en el que Comsa Emte estima que las ventas internacionales asciendan a 857 millones.
Mercados internacionales
La compañía pone todas sus esperanzas en la evolución del negocio de infraestructuras en el extranjero. Ya se ha consolidado en países como Rumania, Turquía, Brasil y Polonia, principalmente, por su especialización ferroviaria. Y ese es el camino que quiere mantener en los próximos años.
“La especialización en el sector de las infraestructuras y la ingeniería, complementada con nuestra experiencia en el ámbito ferroviario, tecnológico y de servicios, nos aporta un valor diferencial para continuar creciendo en mercados internacionales”, ha señalado el presidente de la compañía, Jorge Miarnau.
ERE ‘silencioso’
Pero el buen comportamiento del mercado internacional no puedo apaciguar las turbulentas aguas a nivel laboral. El pasado año, pactó con los sindicatos el despido de 270 trabajadores en España. El acuerdo se rubricó después de que los representantes de los trabajadores denunciaran los ERE silenciosos que aplicaba la cúpula.
La última reestructuración de la empresa, cuyo vicepresidente es Carles Sumarroca, se acordó el pasado 10 de marzo. Los trabajadores de la filial Emte SLU ratificaron hace unos días un expediente que incluye 153 despidos.
Reestructuración de la deuda
Por áreas, la actividad de infraestructuras ha facturado 950 millones; la de ingeniería 304 millones; la de medio ambiente 87 millones; la tecnológica 124 millones; mantenimiento y servicios 59 millones; concesiones otros 21 millones; transporte y logística 18 millones y energías renovables, 11 millones.
Justamente, en esta última actividad se ha planteado el siguiente plan de reestructuración. Concretamente, en las filiales de ingeniería y consultoría ambiental. La compañía propuso el pasado febrero varios ERE para amortizar 70 empleos, una tercera parte de Adasa Sistemas y Ambientis, las sociedades afectadas.
Pero en 2013, a la reestructuración de plantilla se ha sumado la de una deuda que asciende a los 930 millones. Comsa consiguió un crédito sindicado hasta finales de 2016. Asimismo, los accionistas de la compañía completaron la financiación con una ampliación de capital de 40 millones.