Colonial da por cerrado su plan de desinversiones de 500 millones de euros

Colonial da por cerrado su plan de desinversiones. La socimi catalana tiene «prácticamente finalizado» el programa para deshacerse de activos que no considera estratégico y que la ha supuesto unos ingresos de 500 millones de euros, según ha explicado su consejero delegado, Pere Viñolas, durante una rueda de prensa posterior a la Junta General de Accionsitas.

La inmobiliaria ha vendido un total de 10 activos con una superficie total de 98.215 metros cuadrados «sin recorrido en valor». Un 27% de esta superficie corresponde a suelos con elevados niveles de desocupación, otro 35% a inmuebles en ubicaciones secundarias y el resto a activos maduros sin potencial de creación de valor a largo plazo. La última operación cerrada fue la venta del parque comercial Viapark, ubicado a las afueras de Vícar (Almería).

Rebaja la deuda

El programa de desinversiones se enmarca en la estrategia de “flight to quality” que, a base de una rotación activa del portfolio, desinvierte producto maduro o en zonas alejadas de los centros de negocio. Colonial ha destinado estos 500 millones de euros a reducir su deuda, que a cierre de 2022 quedó en 4.924 millones de euros, 421 millones menos, y a impulsar su liquidez.

Aunque por ahora ha dado carpetazo a este plan, la Ibex no descarta lanzar una segunda oleada en el segundo semestre del año. «El primero funcionó muy bien», ha señalado Viñolas, aunque mantiene que a día de hoy no tienen ni superficies seleccionadas ni previsión de importes generados, dado que están centrándose en cerrar el primer programa.

Durante la Junta de Accionista, la empresa ha ratificado el reparto de un dividendo de 0,25 euros por acción, un 5% más que el año anterior. Además, ha ampliado el número de miembros de su consejo de administración de 11 a 13 representantes, dando entrada a Miriam González como independiente y a Manuel Puig, en representación del grupo de belleza y perfumería Puig, que tiene un 7,4% del capital de la socimi.