Codorníu ya vende más que antes de la pandemia
Aunque empañadas por el pico de contagios de ómicron, la cavista logra "las mejores navidades de la última década". Crece casi un 30% en comparación con el año pasado
Después de encadenar hasta seis trimestres con las ventas en negativo, Codorníu logró girar la tortilla de sus ingresos en marzo de 2021. El descenso venía ya de antes de la pandemia y los datos se estabilizaron hasta la pasada primavera. Desde entonces eso sí no volvió a tocar el rojo en la comparativa. Incluso saboreó las mejores Navidades de la última década con unas ventas que crecieron un 6% frente a las de 2019.
Según los datos a los que ha tenido acceso Economía Digital, el decano del cava saldó la campaña navideña –entre octubre y diciembre– con una subida del 27% de los ingresos frente al mismo periodo de 2020, con más restricciones que las vigentes ahora mismo. El dato es ya un 6% mejor que el del trimestre comparable previo al estallido del coronavirus, con toda la restauración abierta.
El grupo que dirige Sergio Fuster consiguió crecer durante toda la primera mitad del ejercicio fiscal 2021/2022, de julio a junio. En el primer trimestre, en verano, la subida fue del 28% frente a 2020 y del 10% frente a 2019. La recuperación de la hostelería, con el motor volviendo a dar síntomas de actividad, fue un punto clave desde el que apoyar la recuperación.
De este modo, las ventas internacionales crecieron al ritmo del 28% y las nacionales se elevaron un 21%. Mercados como Estados Unidos y Asia fueron los que un mejor desempeño registraron. A nivel español, el grupo ya presume de una cuota de mercado en valor del 33% del total en los supermercados –no existen cifras, dicen, en el segmento de la hostelería–. En bares y restaurantes eso sí, la recuperación ya es completa: los ingresos en Navidades fueron un 90% superiores a los del año pasado y un 6% mejores a los previos a la pandemia.
La fiesta sin embargo no fue completa para Codorníu. La razón: el pico de contagios de ómicron durante las últimas semanas de diciembre, que segó la vuelta a la normalidad. Regiones como Cataluña volvieron a imponer el toque de queda y cerraron el ocio nocturno. El consumo en la restauración volvió a bajar. Más en una época clave para la empresa: tanto por las celebraciones familiares como por las cenas de empresa, que en muchos casos se cancelaron.
A la incertidumbre por las nuevas variantes de la Covid-19 se suma la crisis de los suministros. El encarecimiento de productos como el vidrio y el cartón afectó a Codorníu, que hasta el momento capeó la escasez de los materiales. No espera tampoco que existan tensiones en la compra de uvas, más en la transición que realiza ahora mismo con el objetivo de ser 100% ecológica en 2024.
La recuperación de las ventas tras el estancamiento del año 20/21
Fuentes de la compañía explican a Economía Digital que el ejercicio 2020/2021 –entre julio de 2020 y junio de 2021– se había saldado previamente con una escalada del resultado de explotación desde los 1,4 millones hasta los 7,4 millones de euros. No estuvo acompañado por la mejora de los ingresos. Todavía con restricciones sobre la hostelería durante prácticamente todo el ejercicio, la facturación se quedó en 174,4 millones de euros por los 179,9 millones del año previo. No se pudo compensar con el crecimiento de los supermercados.
La firma controlada por el fondo de inversión Carlyle logró recortar gastos “superfluos” y mejorar unas eficiencias para alcanzar la mejora del beneficio bruto. La empresa no comparte el dato de las ganancias finales, aunque sí garantizan que fueron mejores que las de la campaña anterior. En el año 2019/2020, Codorníu perdió 11 millones de euros. La empresa levantó en septiembre el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que tenía abierto.
La evolución de las ventas pasó del -19% del primer trimestre hasta el +50% del último trimestre, que se comparaba eso sí con el periodo de cierre de la hostelería por la primera oleada de la Covid-19. Los 174,4 millones de euros eso sí están todavía lejos de, por ejemplo, los 236 millones que la cavista vendió en el año 2016/2017.
La mejora de las ventas para el decano del cava se produjo de manera transversal en todos los mercados; tanto en la división internacional como la nacional. Hoy, el negocio en el extranjero representa el 35% de los ingresos y el español supone el 65% restante. Antes de la pandemia, la ratio era del 30-70. El camino es dar la vuelta a los porcentajes y que la facturación internacional alcance entre el 70% y el 80%.
Las ventas por internet suponen todavía un porcentaje discreto de los ingresos a pesar de haber alcanzado un crecimiento del 30% en los últimos meses.