Coca-Cola producirá en África las bebidas que venderá en España
Coca-Cola genera nuevos planes para reducir los costes operativos, que incluyen un sistema de "distribución global"
La Coca-Cola que bebe el sur de Europa podría fabricarse en los próximos años en las plantas africanas que están gestionadas bajo la supervisión de la empresaria catalana Sol Daurella. Los planes de la multinacional incluyen la «globalización de la distribución», un esquema incluido en la hoja de ruta que la compañía desarrolla desde 2006 y que ha sido supervisado por el consejero delegado saliente, Muhtar Kent, según confirman fuentes cercanas a la compañía a Economía Digital.
La obsesión de la cúpula saliente (y, casi con total seguridad, de la entrante) ha sido reducir los costes operativos de fabricación y distribución de Coca-Cola. Pero «la bebida de la felicidad» no ha logrado en los últimos ejercicios las ratios de venta y de eficiencia esperadas. Coca-Cola ha perdido valoración y su acción ha caído desde los 47 dólares en febrero del año pasado hasta los 41 dólares actuales.
La cúpula mundial de Coca-Cola ha planteado varios planes alternativos, pero no excluyentes, para hacer que las bebidas producidas en regiones con costes operativos más bajos se introduzcan en las redes de distribución de países con altos costes operativos y salarios, como España. Es, en pocas palabras, un plan con el que la Coca-Cola africana podría entrar en Europa con menores costes operativos.
Hasta ahora, la compañía no ha confirmado ninguno de estos planes, pero el proceso de cierre de plantas con mayores costes de producción comenzó en América Latina y se fue extendiendo al resto de continentes. En España, la clausura de Fuenlabrada, con costes salariales más elevados que el resto de plantas, ha sido uno de los puntos más conflictivos de la unificación, que ha terminado también con otras tres plantas: Alicante, Asturias y Palma de Mallorca.
Egipcias e inglesas
El mercado español cuenta desde hace algunos años con latas producidas en países fuera de España. Egipcias, polacas y turcas, las latas de Coca-Cola procedentes de países con costes inferiores a los españoles se han incrementado de forma notable en España. La embotelladora única (antes para España y ahora para Europa) ha presentado varias demandas contra los distribuidores que adquieren bebidas fuera del país.
«Compré un contenedor de 60.000 latas en 2009 y fue retenido en Tenerife. Las latas habían sido producidas en Egipto. Es obvio que no son falsificadas, pero creo que la Guardia Civil ni se ha molestado en abrir los contenedores. Si son un peligro para la salud pública, habría que demandar al embotellador egipcio«, explicó a Economía Digital un empresario andaluz demandado por Coca-Cola, que ha preferido mantener su nombre en el anonimato.
El negocio de importar bebidas más baratas también incluyó a la cadena de supermercados Dealz. El director general de la compañía, Álvaro Villamizar, explicó a este medio que la cadena no tiene ningún impedimento legal para importar las latas británicas y que su equipo está dispuesto a comprar el producto en España, siempre que el embotellador acceda a presentar una oferta más atractiva.
«Hay libre comercio, con lo cual no hay ningún compromiso con las embotelladoras españolas. Nos encantaría poder comprarlas en España y espero que en el futuro pueda ser así. De hecho hemos tenido ya algunas reuniones con Coca-Cola España. Lo que es una realidad es que hay otra manera de hacer el negocio de retail para España», aseguró el máximo ejecutivo de Dealz en España.
17.000 millones para las plantas africanas
Coca-Cola ahora plantea aplicar el mismo negocio del que han sacado provecho algunas cadenas e importadores en el sur de Europa. La bebida producida en África dispara los beneficios. Mientras tanto, la multinacional despliega inversiones para potenciar la producción de sus fábricas africanas. Coca-Cola asegura que durante la década 2010-2020 habrá invertido 17.000 millones de dólares para ampliar las fábricas africanas y aumentar su producción.