La CNMC multa a ACS y otras 7 empresas por repartirse los contratos del AVE
Competencia impone una sanción de 127 millones a ocho grandes compañías por repartirse entre ellas 82 licitaciones de forma fraudulenta durante los últimos 15 años
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha puesto fin a una trama orquestada por las grandes empresas del sector de la seguridad, la señalización y las comunicaciones para repartirse entre ellas los contratos de licitación del AVE. El fraude se ha resuelto con una multa que asciende a 127,8 millones de euros que deberán subsanar entre todas.
Competencia ha detectado que entre los años 2002 y 2017, algunas de las multinacionales con mayor peso en el país se pusieron de acuerdo para repartirse de forma fraudulenta hasta 82 licitaciones publicadas por el Ministerio de Fomento y Adif para diferentes servicios relacionados con la red ferroviaria española.
La mayor multa ha recaído sobre ACS. La empresa presida por Florentino Pérez deberá abonar una multa de 30 millones de euros por el reparto de los contratos que se realizó a través de su filial Cobra. La lista se extiende también a Siemens (28,9 millones), Nokia (24 millones), Alstom (22 millones), Thales (17 millones), Bombardier (3,6 millones) y Cafs (1,7 millones).
«Durante 15 años formaron un cártel que se repartió licitaciones convocadas por Adif por valor de más de 4.100 millones de euros», ha denunciado la CNMC en un comunicado.
La CNMC extiende las multas a 10 directivos a título personal
Competencia no solo ha querido actuar contra las multinacionales, sino que también ha hecho extensiva su sanción a algunas de las personas que estuvieron supuestamente implicadas en este fraude. Por eso, ha multado con 483.000 euros a una decena de directivos de todas las compañías que tenían cargos de responsabilidad en ese periodo de tiempo.
La CNMC considera que estos pactos entre las grandes compañías suponen una vulneración de la Ley de la Competencia, aprobada en España en 1989, así como del artículo 101 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE), en el que se especifican en qué condiciones pueden operar en el mercado las empresas de los 27 países miembro.
Tras haber abierto el proceso sancionador, el organismo regulador ha accedido a reducir la multa al 50% para las dos filiales de Siemens, así como para su responsable, Gonzalo Martínez Delgado, por haber colaborado con la investigación, lo que les permite beneficiarse del Programa de Clemencia.
Los orígenes del cartel datan de 2002
Competencia ha identificado los orígenes de este fraude en el año 2002. Fue entonces cuando Alcatel y Dimetronic acordaron no competir entre ellas para llevarse las licitaciones ofrecidas para el desarrollo de la red ferroviaria. Se estableció una cuota del 55%-45%. Ambas continuaron con el fraude posteriormente cuando bajo sus nuevos nombres: Thales y Siemens Rail.
En los próximos años se fueron sumando el resto de empresas. NSN, la actual Nokia, comenzó con estas prácticas en el año 2007. Mientras que ACS se sumó en 2008 a través de su departamento Cobra. Alstom y Bombardier se sumaron al cartel en 2014 y CAF Signalling en 2015.
«Las prácticas de este cártel han sido especialmente dañinas ya que, en algunos casos, los efectos del fraude se prolongan hasta 2040 por el periodo de vigencia de algunas de las licitaciones», ha lamentado Competencia.
No es la primera vez que la CNMC detecta este tipo de maniobras fraudulentas. Hace dos años, el organismo regulador ya sancionó con 118 millones a un total de 15 empresas también por repartirse los concursos públicos destinados a la electrificación de la red ferroviaria o a la instalación de los equipos electromecánicos.