Cirsa pierde 150 millones de euros por el coronavirus
La compañía reduce en un 40% los números rojos, pero no consigue abandonar las pérdidas por el desplome de los ingresos. Confía en recuperar los niveles prepandemia en 2022
El líder del juego no logra ganarle la partida al coronavirus. La española Cirsa todavía no pudo recuperarse del impacto de la pandemia y en un 2021 todavía con muchas restricciones activas a sus casinos perdió 150,8 millones de euros. Las pérdidas caen un 40% frente a los 254,6 millones que se dejó en 2020, pero vuelven a ser negativas para una organización que ya estaba en números rojos antes del estallido de la Covid-19.
La empresa dirigida controlada por Blackstone cerró la campaña 2021 con unos ingresos de 1.337,3 millones de euros. El dato es superior a los 1.013,6 millones de euros del primer año de pandemia, pero todavía se nota el impacto de las limitaciones horarias a su actividad, que estuvieron vigentes durante buena parte del año especialmente en España, su principal mercado. De este modo, quedan lejos las ventas de 1.889 millones cosechadas en 2019.
Cirsa tiene motivos para pensar en la recuperación, pues el cierre de la hostelería también impactó duramente al negocio de los slots. Mercados como Marruecos mientras estuvieron sin actividad durante toda la campaña. Otros países, como Italia, mantuvieron restricciones de aforo todo el ejercicio. A pesar de ello, la organización obtuvo un Ebitda de 331,4 millones de euros, un 163% más que los 126 millones obtenidos en 2020.
La empresa depende todavía mucho del mercado español, afectado por cierres puntuales y limitaciones de aforo durante meses. Su contribución al Ebitda fue del 62%. A años luz de los siguientes mercados: Panamá (13,4%) y Colombia (12,4%). Italia aportó apenas el 0,8% del beneficio bruto.
Pese a la recuperación del negocio, Cirsa todavía sufre en su endeudamiento las medidas antipandemia tomadas en los primeros compases de 2020. La deuda neta de la firma de juego cerró el mes de diciembre en 2.361,9 millones de euros. Gracias al crecimiento del Ebitda, la ratio deuda-Ebitda pasó de las 18,8 veces hasta las 7,1 veces. La empresa se puso como objetivo alcanzar una métrica inferior a las 5 veces para el cierre de 2022.
Ómicron segó la recuperación de Cirsa
«La implementación de nuestra estrategia ha sido posible gracias al esfuerzo de ejecución de los planes llevado a cabo por el conjunto de la organización y nos ha permitido lograr unos resultados que ya están muy cerca de los conseguidos antes de la pandemia», celebró el consejero delegado de la compañía, Joaquim Agut.
La firma logró mejorar sus resultados a medida que avanzaba el año. En el tercer trimestre las pérdidas ya alcanzaban los 139,9 millones de euros. Con la reapertura del negocio del juego, la organización recuperó progresivamente la actividad, acompañada de nuevos planes comerciales y de ahorro de costes.
Sin embargo, el estallido de la variante ómicron en diciembre volvió a segar la vuela a la normalidad. Especialmente dura fue en España e Italia, que cerraron el ocio nocturno y provocaron nuevas restricciones en la hostelería. A pesar del varapalo, la organización confía en recuperar a lo largo de 2022 los niveles previos al coronavirus.