Cepsa pone en marcha el primer corredor marítimo de hidrógeno verde en Europa
La empresa española firma un acuerdo con la multinacional noruega Yara Clean, líder mundial en el sector del amoniaco verde
Cepsa y la multinacional noruega Yara Clean, líder mundial en el sector del amoniaco verde, han firmado este miércoles un acuerdo comercial por el que ambas compañías pondrán en marcha el primer corredor marítimo de hidrógeno verde entre el sur y el norte de Europa.
Los reyes Felipe VI de España y Guillermo Alejandro de Holanda han asistido a la firma del acuerdo, que conectará los puertos de Algeciras y Róterdam, en un esfuerzo para impulsar la descarbonización de la industria y el transporte marítimo en el continente.
El acto también ha contado con la presencia de la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, el ministro de Política Climática y Energética de los Países Bajos, Rob Jetten, y el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, entre otras autoridades.
Cepsa espera con esta alianza con Yara Clean Ammonia establecer una cadena de suministro segura, resiliente y eficiente de amoniaco verde e hidrógeno verde a sus clientes industriales y marítimos de Róterdam y Europa Central a través de una planta de amoniaco verde en su Parque Energético de San Roque, operativa en 2027.
Con una inversión de 1.000 millones de euros, será la mayor planta de Europa, al crear 3.300 puestos de trabajo para la producción anual de 750.000 toneladas de amoniaco verde, un producto derivado del hidrógeno verde que puede utilizarse como combustible marino sostenible y como transporte de hidrógeno verde. Esto evitará la emisión de 3 millones de toneladas de CO2.
El presidente de Yara Clean Ammonia, Magnus Ankarstrand, ha destacado la colaboración “pionera” entre ambas empresas para “establecer una cadena de suministro sólida para la transformación de la energía limpia para varias aplicaciones derivadas en Europa, al tiempo que se garantizan los objetivos de descarbonización”.
El consejero delegado de Cepsa, Maarten Wetselaar, ha señalado: “Los acuerdos de hoy dan a nuestro proyecto un acceso crucial a los mercados, los clientes y la infraestructura de distribución para liberar el potencial de nuestro Valle Andaluz del Hidrógeno Verde” a través del “primer corredor marítimo de combustibles sostenibles que unirá el Sur con el Norte de Europa”.
El Valle Andaluz del Hidrógeno Verde es el mayor proyecto presentado en Europa, con una capacidad de 2 GW para producir 300.000 toneladas de hidrógeno verde. Además, permite el desarrollo de una cadena de valor del hidrógeno, promoviendo la descarbonización de la industria en Andalucía y el desarrollo de una nueva industria de combustibles marinos sostenibles con capacidad de exportación al resto de Europa.
Cepsa, proveedor de energía verde
Con este acuerdo de colaboración comercial, Cepsa dispondrá de mayor capacidad para suministrar hidrógeno y amoniaco verde a sus clientes del norte de Europa. La compañía energética española ha llegado a un acuerdo con ACE Terminal (consorcio formado por Gasunie, HES International y Vopak) para distribuir amoniaco verde a la terminal del Puerto de Róterdam.
Precisamente, en el mismo acto, Cepsa ha firmado también un acuerdo con Hynetwork Services, la filial de Gasunie propietaria de la red de transporte de hidrógeno verde en los Países Bajos, que conectará el Puerto de Róterdam con otros clústeres industriales europeos en Alemania, Países Bajos y Bélgica como parte del proyecto Corredor Delta.
Helmie Botter, responsable de desarrollo del negocio del hidrógeno en Gasunie, ha declarado: “Con este acuerdo, reforzamos el corredor de hidrógeno entre España y los Países Bajos”, que “se están posicionando para convertirse en la puerta de entrada del hidrógeno al noroeste de Europa”.
Amoniaco verde, una solución sostenible
El amoniaco verde es una de las alternativas más eficaces para descarbonizar el transporte marítimo. A partir de 2026, se espera que las navieras amplíen el uso de este combustible sostenible para reducir las emisiones de CO2 en un 100%, ya que tanto su producción como su uso como combustible son neutros en carbono.
Además, es más fácil y sostenible transportar amoníaco que hidrógeno, ya que puede transportarse a mayor temperatura (el amoníaco se transporta a -33 °C, mientras que el hidrógeno necesita enfriarse a -253 °C). Tras su transporte, el amoníaco puede volver a convertirse en hidrógeno para su distribución, como se hará en el Puerto de Róterdam.
Este compromiso con los combustibles marítimos sostenibles está en consonancia con el paquete Fit for 55 de la Comisión Europea, que pretende estimular la demanda de combustibles alternativos sostenibles en el transporte marítimo para reducir la intensidad de las emisiones de gases de efecto invernadero en un 2% en 2025, un 6% en 2030 y un 80% en 2050, en comparación con los niveles de 2020.
Además, el desarrollo y uso de combustibles sostenibles contribuye a varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030: ODS 7 (Energía asequible y no contaminante), ODS 8 (Trabajo decente y crecimiento económico), ODS 12 (Producción y consumo responsables) y ODS 13 (Acción por el clima). Se espera que en 2050, el hidrógeno verde encarne un tercio del combustible utilizado en el transporte terrestre mundial y el 60% del transporte marítimo.