Cebrián mantendrá su silla en PRISA hasta finales de 2015
Seguirá en la presidencia dos años más a petición del consejo de administración
La junta de accionistas del Grupo PRISA de este sábado ha despejado cualquier duda sobre la permanencia de Juan Luis Cebrían como presidente de la compañía propietaria de El País y la Cadena Ser.
Cebrián ha sido claro. Se quedará en su silla hasta diciembre de 2015. “El Consejo me lo ha solicitado y yo he accedido a ello”, ha subrayado en su discurso. El contrato de Cebrián tenía vigencia hasta finales de este ejercicio, pero al final seguirá al mando de la compañía pese a que ya tiene 69 años.
Llegar a un acuerdo con los bancos
Entre los puntos principales de la junta estaba la refinanciación de los 3.100 millones de deuda que tiene la compañía.
“Necesitamos estabilizar el balance de PRISA, de modo que pueda garantizarse la seguridad de sus operaciones a medio y largo plazo. Ya existe un plan aprobado por más del 70% de nuestros acreedores”, ha explicado Cebrián. Además, ha insistido, el grupo de comunicación cuenta con una línea de liquidez adicional de 80 millones de euros.
El consejero delegado de PRISA, Fernando Abril- Martorell, también ha puesto énfasis en este asunto. Ha insistido en que la solución “exige obtener la unanimidad de todos los acreedores financieros”. Pero es realista y asegura que, teniendo en cuenta el contexto actual, “no estára exento de dificultades y riesgos”.
Caída de los ingresos por publicidad
Abril-Martorell ha recordado las cuentas de 2012. Los ingresos consolidados han caído el 2,3%, hasta los 2.652 millones de euros. La principal razón, según el consejero delegado, es la fuerte caída de la publicidad en España y Portugal. «Ha descendido más que en años anteriores en línea con el mayor deterioro del consumo y la demanda interna”, ha detallado.
El ERE de ‘El País’
Sobre las medidas que ha tomado el grupo para reducir costes, Cebrían ha hecho énfasis en la venta de inmuebles y los recortes en el ámbito laboral.
“Hicimos en el pasado reciente ventas de activos, parciales o totales, cerramos compañías no rentables y redujimos los recursos humanos de nuestras empresas españolas en casi una tercera parte, al tiempo que ha disminuido el salario medio de sus profesionales y comenzado un relevo generacional en la gestión”, ha detallado el presidente.
En cuanto a los ajustes de personal –más concretamente el ERE que afectó a El País–, Cebrían ha explicado que el acuerdo con los sindicatos fue imposible. Ha insistido en que la tensión llevó a descalificaciones personales y profesionales para los directivos del periódico y el grupo. Pese a todo, Cebrián ha entonado un mea culpa y asegura que desde la compañía algunas decisiones no se hicieron de la forma más correcta.
“Es humano y comprensible que quienes se vieran afectados en lo que consideraban eran sus derechos los defendieran hasta la extenuación. No obstante, a mi juicio, fueron equivocados los caminos elegidos para ello. Como equivocadas fueron, o al menos no suficientemente explicadas, algunas decisiones tomadas por la empresa”