Carlos Slim toma posiciones para ganar la batalla por el ladrillo español con Metrovacesa
En los próximos meses habrá un proceso de consolidación en el sector promotor, y Carlos Slim quiere tener las cartas ganadoras
En mitad de la tormenta energética y la invasión de Ucrania, el sector inmobiliario español ha vivido su propio tsunami y, lo más importante, puede suponer el reinicio del movimiento corporativo en el segmento de las promotoras. FCC ha lanzado una opa sobre el 24% de Metrovacesa. A corto plazo se espera que esto genere estabilidad en la compañía, que impacte en Bolsa y, acto seguido, ser un candidato en el baile de fusiones.
El primer movimiento, ejecutado por Carlos Slim, se revolverá en las próximas semanas. El grupo FCC ha lanzado una opa sobre el 24% -y aspira a llegar al 29% sumado a lo que ya posee- del capital de Metrovacesa por 283 millones de euros. En concreto, la oferta se formula sobre un máximo de 36.402.322 acciones de Metrovacesa, en el que FCC ofrecerá 7,8 euros por título en efectivo, lo que supone una prima de algo más del 20,18% respecto a los 6,49 euros en los que cerró este martes la inmobiliaria.
De esta manera, la inmobiliaria que controla el mexicano Carlos Slim, presentará ante la CNMV la solicitud de autorización de la oferta, junto con el folleto y los documentos necesarios que se deban aportar dentro del plazo máximo de un mes desde la fecha del anuncio, es decir, no más tarde del día 23 de abril.
Una vez que salga adelante, y a la espera del papel que tomen los principales accionistas de Metrovacesa, BBVA (20%) y Banco Santander (49%), la compañía quiere convertirse en protagonista del baile de fusiones del segmento promotor, según explican a ECONOMÍA DIGITAL en fuentes del sector.
El escenario no es sencillo, sobre todo tras la fusión fallida de hace unos meses entre Neinor y Vía Célere. En este contexto, hay una serie de nombres propios que serán los protagonistas. Por un lado la propia promotora dirigida por Borja García-Egotxeaga, así como Aedas y, con su nuevo accionista de referencia, Metrovacesa.
Un gigante del sector promotor
Los números en cualquiera de sus formas engendran un gigante del sector, en concreto el más grande. Algo que Carlos Slim meditará después de realizar este movimiento, tal y como explican las fuentes a este medio.
Metrovacesa tiene un valor neto de sus activos (NAV) de 2.399 millones de euros al cierre de 2021. Según sus cuentas, Neinor tiene unos activos netos por calor de 1.854 M€; mientras que Aedas suma un NAV de 1.463 millones. De esta manera, la confluencia de Metrovacesa con cualquiera de sus rivales generaría un valor de activos superior a los 3.500 millones de euros.
De hecho, hace semanas trascendió en la prensa unas conversaciones entre Aedas y Metrovacesa que finalmente no llevaron a ningún sitio. No obstante, el mercado da por descontado que habrá una concentración en el sector, aunque por ahora no está fructificando. Básicamente no se han llevado a cabo por acoples económicos sobre sus valoraciones.
Las fusiones que vendrán
Neinor y Aedas ya tienen parte de los deberes hechos con las compras de Quabit y Áurea Homes, respectivamente. Y ahora es el turno de Metrovacesa. La cuestión será determinar, entre este trío de promotoras líderes del mercado, quién casa con quién. Sin descartar que Vía Célere también tiene puesto el cartel de ‘busca fusión’ por parte de su fondo -Varde-.
Uno de los grandes problemas hasta ahora ha sido que cotizan con elevados descuentos respecto al valor neto de sus activos (NAV). Eso impide que cuadre el canje de acciones entre las potenciales empresas participantes.
Otro camino que todas estas grandes promotoras exploran es hacer adquisiciones de medianas y pequeñas empresas que aporten suelo, ya que en este tipo de absorciones sumar plantillas no interesa tanto al comprador. Muchas promotoras de menor tamaño se están encontrando con dificultades para recibir el llamado préstamo promotor, con el que se financian las obras, porque los bancos han endurecido las condiciones de preventas. Por tanto, este tipo de salida, una venta corporativa, comienza a visualizarse como una solución en un sector que busca la consolidación.