Caixabank instalará cajeros automáticos en más de 30 municipios de Guadalajara

El objetivo es reducir la brecha financiera dotando de cajeros automáticos a los pueblos de la provincia que carecen de servicios bancarios

Foto de familia y, en el centro, el presidente de la Diputación de Guadalajara, José Luis Vega; y el director territorial de CaixaBank en Castilla-La Mancha, Jaime Campos.

Foto de familia y, en el centro, el presidente de la Diputación de Guadalajara, José Luis Vega; y el director territorial de CaixaBank en Castilla-La Mancha, Jaime Campos. Caixabank.

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Caixabank y la Diputación de Guadalajara han firmado un contrato para instalar cajeros automáticos de la entidad financiera en 33 municipios de la provincia. Después de que el banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri, resultase adjudicatario del procedimiento de licitación, dispone de un máximo de 3 meses para llevar a cabo la instalación y que los cajeros entre en funcionamiento.

En concreto, han suscrito el documento el director territorial de Caixabank en Castilla-La Mancha, Jaime Campos, y el presidente de la Diputación de Guadalajara, José Luis Vega. En el acto, celebrado en la sede de la Diputación de Guadalajara, también ha participado el director de Instituciones de Caixabank en Castilla-La Mancha, José Luis Campo Ruano, y el diputado delegado de Obras y Servicios, Ramiro Magro.

Solucionar la brecha financiera

El objetivo es dotar de cajeros automáticos a los pueblos de la provincia que carecen de servicios bancarios, según ha apuntado el presidente de la Diputación de Guadalajara. Así pues, la intención es «corregir la brecha financiera que sufren las zonas rurales, facilitar gestiones a sus vecinos y vecinas y, con ello, ayudar a dinamizar económica y socialmente las comarcas rurales”.

Por su parte, el director territorial de Caixabank en Castilla-La Mancha ha destacado “el compromiso de la entidad con la Diputación de Guadalajara, sus municipios y sus vecinos para evitar la exclusión financiera”. También, ha subrayado que la entidad financiera entiende la «inclusión financiera como una banca próxima y accesible, manteniendo inalterable el compromiso del banco de estar cerca de los clientes».

Los cajeros que se instalarán serán nuevos y deberán permanecer en perfecto estado de conservación durante los cuatro años de vigencia del contrato. Entre las distintas operaciones que se podrán llevar a cabo en estos cajeros, además de la retirada de efectivo, destaca el ingreso de dinero con retención de billetes falsos, la lectura y actualización de libretas bancarias y las transferencias entre cuentas.

No obstante, también se podrá efectuar el pago de tributos gestionados por el Servicio de Recaudación de la Diputación y de impuestos autonómicos y estatales, la recarga de móviles, el pago de multas o la recuperación de tarjetas capturadas, que deberán ser remitidas a la oficina bancaria emisora de la tarjeta.

Accesibilidad para personas con discapacidad

Los cajeros deberán de estar adaptados para personas con discapacidades físicas, y por tanto, ser accesibles para sillas de ruedas y disponer de menús adecuados para personas con problema de visión, como ayuda guiada por voz, conexión por auriculares y teclado en braille.

Además, deberán estar dotados de cámara de seguridad y lector para cualquier tipo de dispositivo, desde tarjetas y móviles, hasta relojes y pulseras. Asimismo, habrán de contar con una unidad de escáner para lectura de códigos de barra y unidad de impresión de recibos.

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