Caixabank trasladará unos 700 empleados de Castellana a la torre Kio, Manoteras y Las Rozas
El banco no tiene obligación de negociar con los sindicatos ni con los empleados el traslado si es de menos de 25 kilómetros, según el convenio
Más de 700 empleados de Caixabank podrían verse afectados por la venta de la sede del banco en Castellana 51, Madrid. Todo dependerá de las condiciones de compraventa y si la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri alquila alguna planta del edificio o incluso las oficinas que se encuentran a pie de calle.
Si esto ocurre no haría falta el traslado toda la plantilla a otros edificios del banco. Actualmente, trabajan en Castellana 51 el departamento de riesgos, banca privada, el negocio inmobiliario o el de empresas, además de la dirección territorial metropolitana en Madrid y VidaCaixa. En la planta baja, incluso, hay dos oficinas Store que cuentan un total de 25 empleados.
El censo que manejan distintos sindicatos cifra en 760 el número de personas que trabajan en esta sede, una cifra que se ha reducido en los últimos meses teniendo en cuenta que ya ha salido mucha gente a consecuencia del ERE y se han reestructurado los quipos tras la fusión con Bankia.
Manoteras, donde se encuentran los servicios centrales; Las Rozas, que reubica al personal tecnológico y digital; o una de las torres Kio, donde se situaba la sede de Bankia, se perfilan como los destinos para los empleados que salgan de Castellana 51.
Hasta la fecha ningún trabajador ha sido avisado del traslado definitivo a cualquiera de estos edificios, explican fuentes sindicales. Aun así, el banco no tiene la obligación de negociar con ellos ni con los empleados si el traslado es de menos de 25 kilómetros, que es lo que marca el convenio.
La venta de la sede trascendió a principios de abril. Castellana 51 había sido la base de operaciones del banco catalán en Madrid hasta la fusión con Bankia, cuando Caixabank decidió instalarse a solo 4 kilómetros de distancia, en Castellana 216, donde se encuentran las Torres Kio.
De hecho, el banco que dirige Gonzalo Gortázar presentó hace solo unos días su nuevo plan estratégico en esta nueva ubicación. Según apuntan distintos medios, está previsto que Caixabank reciba este jueves distintas ofertas por parte de los interesados que quieran hacerse con la antigua sede y que la venta se lleve a cabo durante el verano.
Entre los potenciales compradores se encuentra Inmocaixa, el portal inmobiliario de la Fundación Bancaria La Caixa, que ya ha empezado a invertir en oficinas y recientemente ha comprado algunos edificios en Madrid. Además, la sede de CriteriaCaixa, el ‘holding’ de inversiones que gestiona el patrimonio de la Fundación, también se encuentra en el número 51 de la Castellana.
Fuentes cercanas a la compañía comentan que tendría lógica pujar, pero dependerá de las condiciones y el precio. De momento, se ha conocido que el precio de venta podría alcanzar los 250 millones de euros, que CBRE se encargará de la operación y que hay más empresas interesadas. Desde la entidad no han querido hacer comentarios.