Caixabank crea una Dirección de Riesgo Climático
La nueva área se encargará de coordinar el despliegue de la gestión y análisis de los riesgos climáticos y medioambientales en la entidad financiera
Caixabank ha creado la Dirección de Riesgo Climático, una área que formará parte de la Dirección de Sostenibilidad, dirigida por Eugenio Solla. A través de este cambio en la estructura, la entidad financiera se propone reforzar su apuesta por la sostenibilidad, uno de los elementos clave del Plan Estratégico 2022-2024 del banco.
En concreto, la Dirección de Riesgo Climático se encargará de coordinar el despliegue de la gestión y análisis de los riesgos climáticos y medioambientales de acuerdo con el creciente marco regulatorio, las recomendaciones del ‘Task Force on Climate-related Financial Disclosures’ (TCFD) y las directrices sobre la presentación de informes no financieros de la Comisión Europea.
El departamento estará dirigido por Stefan Rodia García-Petit y estará alineado con las otras cuatro direcciones de la entidad financiera: Estrategia y Seguimiento de Sostenibilidad, dirigida por Severiano Solana; Riesgos de Sostenibilidad, liderada por Xavier Fortuny; Coordinación de Productos y Negocios Sostenibles, encabezada por Álvaro Colino, y Comunicación ESG, dirigida por Javier Tomé.
Actualmente, la Dirección de Sostenibilidad cuenta con 30 profesionales que trabajan para impulsar la sostenibilidad de manera transversal con todas las áreas del banco.
Asesoramiento en el desarrollo de estrategias ambientales
Con esta modificación en su estructura, el banco reafirma su apuesta por «acompañar» a sus clientes en el desarrollo de estrategias ambientales y climáticas complejas que requieren grandes inyecciones de capital». A través de la «canalización de capital y de recursos económicos», la entidad financiera contribuye a «reorientar la financiación y la inversión con una finalidad sostenible».
«Este asesoramiento también establece restricciones a la financiación de sectores intensivos en emisiones de carbono y al cumplimiento de determinadas condiciones, como la existencia de objetivos concretos y alcanzables de descarbonización alineados con el Acuerdo de París», ha apuntado.
Sin embargo, según ha puntualizado, el banco podría financiar de forma excepcional actividades en sectores de determinados países en los que la transición energética «pueda resultar particularmente compleja o tener un impacto social adverso significativo».
Sostenibilidad y descarbonización
Asimismo, según ha indicado, la creación de la dirección de riesgo climático favorecerá el impulso del «compromiso con la descarbonización de la propia actividad y sus clientes a través de un modelo de negocio y gestión sostenible que tiene el riesgo climático incorporado en su análisis de clientes y operaciones».
«La sostenibilidad ha adquirido un papel protagonista transversal que está vinculado al negocio y se va desplegando a toda la actividad y productos y servicios del banco», ha señalado.
En este sentido, el banco ha impulsado distintas iniciativas centradas en promover la transición energética de las empresas y del conjunto de la sociedad, mediante, entre otros, el desarrollo de soluciones para particulares con foco en movilidad y vivienda sostenible, y el fomento de las inversiones con criterios ASG (ambientales, sociales y de gobernanza).
En el marco del Plan Estratégico 2022-2024, la entidad financiera tiene como objetivo movilizar 64.000 millones de euros en financiación sostenible, a través del impulso de varias iniciativas centradas en la oferta de productos, el asesoramiento ASG, la concienciación y la formación.