Caixabank, el banco que más sube las comisiones: un 300%
La subida de Caixabank, Abanca o BBVA en el último año incrementa en un 30% la media de comisiones de la banca, hasta los 141 euros
Caixabank es la entidad que más ha subido las comisiones en los dos últimos años. En 2020 todo el sector bancario empezó a cambiar las condiciones de sus cuentas, pidiendo más vinculación a cambio de no cobrar por ellas a sus clientes. En este transcurso, el banco catalán ha pasado de cobrar 60 euros por mantenimiento de cuenta hasta los 240 euros, lo que supone un 300% más.
La subida de Caixabank se produjo en el último trimestre de 2020 y empezó a aplicar a los clientes de Bankia, entidad con la que se ha fusionado, en noviembre del 2021; El año pasado, el Banco Santander seguía sus pasos y elevaba las comisiones más de un 60%, de 144 a 240 euros anuales.
Así lo pone de relieve el III Barómetro sobre comisiones bancarias de Asufin, la asociación de usuarios financieros, donde también se destaca que en el último año han seguido esta táctica tres entidades más. Abanca, que ha pasado de cobrar 50 euros a 144 euros, un 188% más; BBVA, que las ha subido de 100 a 160 euros, un 60% más. Y Kutxabank de 100 a 120 euros, un 20% más.
Las comisiones de la banca suben de media hasta los 141 euros
Así, Santander y Caixabank son ahora los bancos españoles con las comisiones más elevadas, 240 euros en ambos casos si no se cumplen requisitos de vinculación. Le sigue BBVA con 160 euros, Bankinter con 150 euros y Abanca con 144 euros. Fuera de este top 5 también se encuentran Deutsche Bank, Ibercaja y Banco Sabadell, que cobran hasta 120 euros al año. Además de Cajamar, cuya comisión es de 80 euros. Y Unicaja, que cobra 60 euros.
La oleada de comisiones de 2020 y 2021, en la que han participado todas las entidades, ha subido la media progresivamente. Solo en el último año un 30%, desde los 110 euros hasta los 141,3, según revela este informe.
Asufin pone de relieve la complejidad de requisitos que deben cumplir los clientes para poder librarse de estas comisiones, sobre todo, aquellos que tienen ingresos bajos. Caixabank ha incluido dos niveles de vinculación para liberar a sus clientes de pagar comisiones o al menos, una parte de ellas.
En el primer caso, si el cliente tiene unos ingresos anuales de 20.000 euros, nómina mínima de 600 euros o pensión de 300 euros, la comisión se reducirá a 15 euros el trimestre euros. Pero si además tienen tres o más recibos domiciliados en Caixabank al trimestre, o se hacen tres o más compras en este periodo,(este sería el segundo caso) la cuenta no tendrá comisión.
En Abanca han establecido tres niveles de vinculación. El premium, donde se pide domiciliar la nómina y tener contratado dos seguros o inversiones por 8.000 euros. Y si se cumple, la comisión es de cero euros; El denominado plus, que obliga a mantener 30.000 euros de saldo, aquí la comisión bajaría a 44 euros al año. Y el último, que cobra 88 euros al año por domiciliar la nómina de más de 600 euros y tener un saldo de al menos 500 euros.
Todas las entidades han incluido exigentes requisitos para poder liberar a sus clientes de pagar comisiones. Frente a esta situación, la asociación destaca que la mejor solución es abrir una cuenta online sin condiciones, como la que han lanzado en los últimos años BBVA, Santander y más recientemente Banc Sabadell.
Aunque en este sentido, recuerdan que no es apta para todos los clientes ya que tanto por el nivel de servicios ofrecidos como la obligatoriedad de operar online va dirigida esencialmente a un público joven. Y cuando tengan la necesidad de contar con mayores servicios, tendrán que contratar una cuenta tradicional.
Caixabank también tiene la comisión por tarjeta más elevada
Por otra parte, la asociación alerta de que la subida de las comisiones más básicas se traslada también a las tarjetas de débito, que se han encarecido de forma importante en el último año, pasando de costar 30,17 euros a 32,73 euros.
Caixabank tiene la cuota más cara, 50 euros anuales cuando hace un año costaba 36 euros, apunta. También sube Unicaja de 32 a 44 euros y Abanca de 28 euros a 30 euros. La política de Caixabank coincide con la comercialización de la tarjeta de débito MyCard, en la que las compras se liquidan como mínimo dos días después de la compra, y que en estos momentos tiene como uno de sus principales reclamos la gratuidad. Una práctica que ha sido denunciada por Asufin ante el Banco de España.
La asociación descarta que este escenario cambie a lo largo del año 2022 y concluye que la banca no va a renunciar a esta vía de ingresos, pese a la subida de tipos de interés, que ya de por si va generar más beneficios al sector.