Brufau endurecerá la batalla legal de Repsol contra Argentina
La nueva demanda de YPF apenas preocupa en la petrolera española, aunque desde Madrid habrá respuesta en los tribunales
El presidente de Repsol, Antoni Brufau, ha advertido de que habrá respuesta en los tribunales si la demanda de YPF anunciada en la madrugada del jueves prospera.
La compañía argentina considera que hubo irregularidades en las retribuciones de los ejecutivos españoles.
Por esta razón, su presidente, Miguel Galuccio, anunció en la junta de accionistas de la antigua socia de Repsol que trabaja en varias denuncias.
El “argumento jurídico” apenas preocupa en Madrid. No obstante, se darán nuevos pasos en los juzgados internacionales si YPF insiste en avanzar por esta vía.
Junta de accionistas
En el cónclave de accionistas de Repsol, celebrado este viernes, Brufau aseguró que las retribuciones en duda se aprobaron “cumpliendo con la legislación y con el respaldo de los auditores”.
El gobierno argentino, no obstante, considera ilegales los sueldos que se pagaban desde la época en que Alfonso Cortina presidía la multinacional española.
La maraña judicial que despunta en el entorno de Repsol se sumaría a los procesos abiertos en Estados Unidos (EEUU) por la expropiación, hace un año, de YPF.
La actual presidenta argentina, Cristina Fernández (FpV), ordenó la incautación de las acciones controladas por Repsol.
Oferta de ‘paz’
Brufau ha recordado en la junta que no habrá acuerdo por YPF hasta que Argentina abone los títulos confiscados. La cantidad que reclama es de 8.500 millones de euros.
La solución dista del pacto propuesto por Fernández al presidente de La Caixa, accionista mayoritario de Repsol.
La líder argentina entregó a Isidro Fainé un documento en el que se proponía sellar la paz a cambio de compartir la explotación industrial del yacimiento de Vaca Muerta.
El campo petrolero al sur del país andino contiene una de las mayores reservas de crudo del mundo.
Vaca muerta, colea
Desde la salida de Repsol, Argentina ha sido incapaz de ponerlo en valor a través de YPF ni de sustanciar pactos con la competencia internacional de la participada de La Caixa.
Brufau rechazó la alternativa basándose en la reorientación estratégica de Repsol hacia otras zonas del planeta.