Bonpreu irrumpe en la guerra de las eléctricas independentistas
La empresa catalana comprometida con el 'procés' entra en el sector y se promociona con un anuncio que llama a "defender cueste lo que cueste la libertad"
El independentismo es un nicho de mercado goloso para muchas empresas que saben sacar tajada del rechazo de algunos simpatizantes de este movimiento a firmas españolas que no comulgan con sus objetivos secesionistas. En el sector de la luz, Bonpreu Esclat Energia ha irrumpido para disputar este espacio a las consolidadas Som Energia o CatGas Catllum.
La empresa de alimentación catalana con sede en Les Masies de Voltregà (Barcelona) se ha dado a conocer con un vídeo lleno de guiños implícitos al independentismo. Con un marcado acento nacionalista, la empresa llama a sumarse para «defender cueste lo que cueste la libertad». Además, hace un gran énfasis de su enraizamiento a Cataluña.
Vídeo promocional de Bonpreu Esclat Energia, donde se aprecian claros guiños al procés catalán / Bonpreu
Bonpreu: idilio de una empresa con el ‘procés’
La compañía se ha significado en más de una ocasión al lado de la Generalitat y sus tesis independentistas. Los supermercados de la compañía han venido durante varios años las camisetas de las manifestaciones secesionistas organizadas por la ANC. Asimismo, la empresa hizo un cierre patronal el día de la huelga general del 18 de octubre de 2019, con un permiso retribuido para empleados, para protestar por la sentencia del procés.
Bonpreu jugó un papel crucial en la toma de la Cámara de Comercio de Barcelona, que cayó en manos del fanático empresario Joan Canadell. El presidente del grupo y propietario al 50% de la empresa concurrió en la lista Eines de País que impulsó la Assemblea Nacional Catalana.
CatGas Catllum, la competencia de lazo amarillo
No es la única energética que busca pescar en el río independentista, puesto que otras ya llevaban tiempo captando clientes muy significados con la causa. Es el caso de CatGas Catllum, una empresa enraizada en Cataluña que cuelga un lazo amarillo de apoyo a los condenados del procés a continuación de su logotipo en sus grafías oficiales.
La empresa energética participa en la campaña independentista Fes el canvi, que incita a los consumidores adeptos al procés a abandonar sus respectivas compañías para sumarse a estas, más hostiles contra España y dispuestas a seguir los dictados de la ANC sobre insumisión fiscal. También, forman parte otras firmas como Parlem, SolarProfit, Petrolis Independents, Mutuacat o Mussap.
CatGas generó la polémica al intentar introducir propaganda política en sus espónsores. La empresa, que había estado patrocinadora del Fútbol Sala Garcia de Santa Coloma de Gramenet, perdió su posición al usar el color amarillo en su imagen corporativa en clara alusión a los presos del procés.
Som Energia, alineada con el procés
Som Energia es otra de las grandes patas del negocio eléctrico entre la clientela de lazo amarillo en la solapa. Formó parte de las empresas recomendadas por Consum Estratègic, la lista de la ANC con sociedades afines al procés catalán para incitar al boicot de negocios no alineados con la independencia y que tuvo que cerrar por una demanda interpuesta en la justicia por la patronal Foment del Treball.
La compañía se posicionó en contra de la sentencia del procés, pese a no definirse como independentista y reconocer la diversidad ideológica de sus miembros: «La publicación de esta sentencia supone un grave retroceso democrático en el ejercicio de los derechos y libertades individuales y colectivos».