Bon Preu se deja la mitad de los beneficios por la inflación

La cadena de supermercados catalana ganó 34 millones de euros en el ejercicio 2021-2022, un 44% menos por la subida de costes

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La alta competitividad en el sector de la distribución lleva a la mayoría de supermercados a trabajar con márgenes muy estrechos. Eso les hace especialmente vulnerables a las crisis de precios, un hecho que, al final, acaba repercutiendo en sus cuentas. Así lo muestran los resultados de Bon Preu del ejercicio 2021-2022, cuando la cadena redujo casi a la mitad sus beneficios por la inflación.

Según las cuentas reportadas al Registro Mercantil, la mayor distribuidora de capital catalán ganó en el pasado ejercicio, compuesto entre el 1 de marzo de 2021 y el 28 de febrero de 2022, 34 millones de euros, un 44% menos en comparación con los 61 millones anotados en el periodo anterior. Esta mella en sus beneficios fue causada por el aumento de los costes aprovisionamiento, que crecieron en un 11%.

Las fechas coinciden con el inicio de la escalada de los precios de las materias primas y el IPC general en otoño de 2021 e invierno de 2022, llegando a un índice del 7,6% en febrero, tal como marca el Instituto Nacional de Estadística (INE). En el caso de Bon Preu, el gasto en abastecimiento pasó de ser de 1.301 millones hasta febrero de 2021 a alcanzar los 1.580 millones el año 2022. De esta cifra, la gran mayoría corresponde al consumo de mercaderías: creció un 14% hasta los 1.478 millones.

Ni siquiera un aumento de casi el 10% de sus ingresos fue suficiente para revertir el impacto de la subida de costes. A pesar de que 2020 fue un año extraordinario para el consumo en la distribución por el cierre de la hostelería, la empresa dirigida por Joan Font consiguió incrementar la facturación hasta los 1.782 millones de euros el año siguiente, su récord particular, después de vender por más de 1.600 millones en 2020-2021. Aun así, el encarecimiento de sus gastos dejó el resultado de explotación en 35 millones, un 51% menos.

El informe de cuentas de la compañía con sede en Les Masies de Voltregà (Barcelona) reconoce que el aumento de precios de las materias primas y del suministro de gas y electricidad afecta “directamente a la demanda del mercado y a la economía en general”, mientras añade que está desarrollando actuaciones para minimizar su impacto en sus negocios. Eso sí, durante la redacción del documento, Bon Preu cometió el error de estimar que a finales de año “la inflación volvería a parámetros normalizados”. Los precios se moderaron en los últimos meses de 2022, pero siguen en rangos muy elevados, especialmente en la alimentación.

Contratos eléctricos y de cobertura de tipos

Más allá del precio de las materias primas, otra de las amenazas a las empresas en los últimos meses está siendo los efectos de la subida de tipos y los costes energéticos. Para curarse en salud, la distribuidora tiene contratadas operaciones de cobertura de tipos de interés por valor de 130 millones de euros destinadas a cubrir “el riesgo de posibles aumentos en los gastos financieros”, además de contratos hasta 2027 para comprar electricidad con diferentes vencimientos para “hacer frente a posibles cambios de valor en el precio”.

Pese a la bajada de los beneficios, la cadena de supermercados se propuso crecer en número y evolucionar en sus modelos comerciales para el ejercicio que cerrará a finales de este febrero. En este sentido, en una entrevista con Europa Press, el director financiero de la compañía, Pere Anglada, aseguró que en 2021 tuvieron que frenar las inversiones por la pandemia, pero que contaron con una cartera de proyectos de 200 millones para el 2022.

De hecho, la empresa abrió tres tiendas en diferentes municipios de la provincia de Barcelona, y espera continuar con las aperturas este 2023, con establecimientos Escalt en Sabadell, Cunit (Barcelona) y Lleida. Su objetivo era cerrar el ejercicio con una facturación superior a los 1.900 millones.

Recientemente, el grupo presentó la Ciudad Logística que planea instalar en Montblanc (Tarragona) con una inversión de 204 millones de euros. El centro tiene como objetivo avanzar en la expansión comercial de Bon Preu en la provincia. También generará alrededor de 900 puestos de trabajo.

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