BBVA, Santander y Caixabank se lanzan al mercado de deuda antes de las próximas subidas de tipos
Los grandes bancos aprovechan el apetito inversor para blindar su liquidez antes de nuevos movimientos en la política monetaria
Los grandes bancos se han lanzado al mercado de deuda en los primeros compases del año. Caixabank anunció el martes su primera emisión de deuda en el mercado norteamericano y se suma a Santander, que ya ha realizado dos movimientos en este comienzo de año, y BBVA que también inauguró el mercado de deuda con una emisión el 3 de enero.
Las entidades han aprovechado los primeros días del año para acceder al mercado de deuda en un momento de incertidumbre macroeconómica. Los grandes bancos han apostado por el apetito inversor existente antes de que se produzcan nuevas subidas de tipos de interés.
Caixabank lanzó el martes su primera emisión en dólares para colocar bonos sénior no preferentes en el mercado norteamericano. La emisión tiene un vencimiento a seis años, es decir con un vencimiento hasta 2029, aunque cuenta con opción de amortización anticipada en el quinto año.
La cuantía final de esta emisión todavía no se conoce, dado que falta por cerrar la colocación y dependerá de la demanda existente entre los inversores.
El movimiento realizado por la entidad catalana al lanzarse a la búsqueda de liquidez sigue a los ya realizados por Santander y BBVA. Las dos entidades inauguraron el año con sendas emisiones el 3 de enero en las que captaron, en total, 4.500 millones de euros —3.500 millones Santander y 1.000 millones, BBVA—.
Santander realizó una emisión de cédulas hipotecarias con la que inauguró el mercado de deuda el 3 de enero. En este movimiento colocó 3.500 millones de euros en dos tramos de vencimiento. Por un lado, 2.500 millones a tres años y otros 1.000 millones con un vencimiento a siete años.
Tras esta, el 9 de enero Santander volvió a lanzarse al mercado de deuda con un movimiento récord que no se veía desde 2009. En este caso, la entidad captó 5.000 millones de euros en deuda sénior preferente con una sobredemanda de 7.500 millones de euros.
Esta cifra fue la mayor que había realizado un banco de este tipo de deuda desde 2009 cuando el holandés Rabobank colocó otros tantos millones de euros.
Los grandes bancos aprovechan la ventana de apetito inversor
Por su parte, BBVA también se lanzó a los mercados el 3 de enero colocando 1.000 millones de euros en deuda sénior no preferente, con un plazo de 8 años de amortización, aunque contempla la posibilidad de salida anticipada a los 7 años.
Los bancos han aprovechado una ventana de tranquilidad en los mercados en un año donde la incertidumbre es la palabra que más se repite al hablar de las previsiones económicas.
El acceso a los mercados de deuda permitirá a las entidades contar con un margen de liquidez para poder hacer frente al comienzo del ejercicio y esquivar posibles turbulencias que puedan aparecer en el horizonte.
A esto se suma la previsión de que los bancos centrales continúen con su política monetaria de subida de tipos. En este escenario, un incremento de los tipos de interés también encarecería, previsiblemente, la colocación de deuda por parte de los bancos.