Barcelona se empobrece

La riqueza de la provincia de Barcelona cayó en 1,4 puntos en 2012, hasta el -0,8%. Un año antes, había crecido casi medio punto, hasta el 0,6%. Tras el cálculo de ambos datos está el departamento de estudios de La Cambra de Comerç de Barcelona, quien han tomado el relevo de CatalunyaCaixa en monotorizar la evolución del Producto Interior Bruto (PIB) de la principal provincia catalana junto a los profesionales de la Diputació y otros colaboradores, como el profesor Martí Parellada.

El informe de conclusiones (un documento de 220 páginas con datos de las 11 comarcas) muestra como la riqueza barcelonesa “resiste, en términos reales, mejor que la del conjunto de Catalunya, que baja el 1,3%, y la de España, que recula el 1,4%”, en palabras del presidente de la institución empresarial, Miquel Valls. Para hacer el cálculo, han usado tanto datos del Institut d’Estadística de Catalunya (Idescat) como del Instituto Nacional de Estadística (INE) y cifras propias, como la información que le proporciona la encuesta de clima empresarial.

En la presentación del estudio, que ha tenido lugar este viernes, incluso se ha realizado una estimación genérica del comportamiento en los próximos meses. En línea con otros análisis, se estima que el PIB crecerá en el último trimestre del año, que se mantendrá a lo largo de 2014. Eso sí, el optimismo es moderado. La creación de empleo no se prevé que evolucione a igual ritmo.

Turismo

El seguimiento de este indicador se incluye en el Informe Territorial de la Provincia de Barcelona, estudio que se reedita una vez al año con los mismos protagonistas. Justifican el menor incremento de la pobreza en la zona gracias al turismo, especialmente del sector hotelero. A ello se le debe sumar la evolución de las exportaciones, el elemento que mantiene la economía.

Con todo, el principal salvavidas de la provincial también sufrió en 2012. La ocupación hotelera (o en campings, donde incrementa la oferta de pernoctaciones) disminuyó ligeramente.

Tejido empresarial

El pasado año fue especialmente duro en la desaparición de empresas. Llegaron a las 171.700, el mínimo desde el inicio de la crisis. En 2007 existían en la provincia 204.100 negocios e incluso en 2009, cuando la caída del PIB llegó al momento más bajo (-4,6%), aún resistían 183.800. Eso sí, a lo largo de todo el período, las empresas de la provincia han tenido casi el mismo peso en el conjunto de Catalunya. Representan aproximadamente el 71,7%.

La destrucción del tejido empresarial ha propiciado que casi una de cada cuatro personas en activo en la provincia esté en paro en 2012. El incremento en todas las comunidades ha sido menos intenso que en años anteriores.