La banca descarta topar las hipotecas: concederá moratorias a familias con dificultad de pago
Los bancos creen que el foco de preocupación está en las hipotecas a tipo variable concedidas en los últimos cinco años
La banca descarta topar las hipotecas, como propone el sindicato UGT y Unidas Podemos, aunque reconoce que muchas familias tendrán dificultades financieras para hacer frente al pago de las cuotas ante la subida de tipos de interés. La solución, aseguran, están en estudiar caso por caso y ofrecer, por ejemplo, moratorias. Pues, los primeros interesados en que los clientes no dejen de pagar, son las propias entidades.
Así lo expresaban este martes, cuatro de los cinco bancos más grandes del país en un encuentro financiero donde se ha recordado que el Euribor, el índice de referencia para las hipotecas en España, cerró septiembre en el 2,2%, lo que implica un aumento considerable desde el -0,5% en el que arrancó el año.
Las previsiones apuntan a que el Euribor llegará incluso al 3%-4% el próximo año, lo que implica que las cuotas hipotecarias también serán más caras y muchos hogares no puedan hacer frente a sus pagos en un entorno de elevada inflación y crisis de precios.
La morosidad no ha repuntado de momento, pero lo hará. De hecho, la banca asume que los impagos llegarán en 2023. Pero descartan que la solución sea topar hipotecas variables, es decir, reducir esta subida de cuota. «No creo que sea la solución y desde el punto de vista legal sería discutible porque la subida solo afecta a una parte de los clientes», explicaba el consejero delegado de Unicaja, Manuel Menéndez.
El ejecutivo cree que la subida de tipos por si sola no impacta en la renta de las familias, solo lo hace si se suma a la subida de precios de la energía o la alimentación. Y en estos casos, la entidad malagueña prevé «analizar casos particulares y buscar soluciones» pues cuentan con experiencia de la crisis anterior y además están mejor preparados que entonces.
Una opinión que compartía el consejero delegado de Banc Sabadell. Aunque César González-Bueno iba más allá y especificaba que, «el foco de preocupación del banco está en las hipotecas a tipo variable concedidas en los últimos cinco años» ya que no han pagado todavía mucho principal.
El banquero aseguraba que el 50% de su cartera hipotecaria es antigua y ya han pagado el principal. Y las hipotecas que se han firmado en los últimos años han sido mayoritariamente a tipo fijo, por lo que tampoco se verían afectadas por el la subida del Euribor. Es decir, que las variables que si se verán afectadas, serán las menos.
Y aquí, «la clave será conceder una moratoria sobre el principal pendiente de pago» para ese grupo, que, insiste, «no es mayoritario». El número dos de Sabadell entiende que la banca será prudente y buscará soluciones buenas para sus clientes con el fin de evitar situaciones dramáticas, como los desahucios vistos en la crisis de 2008.
El CEO de la entidad catalana cree que el sector financiero debe dar solución a un segmento de la población que de forma inesperada ha visto como la cuota de su hipoteca aumenta. Una situación, aseguran, que ni los propios bancos preveían hace apenas unos meses.
El número dos del Banco Santander, Jose Antonio Álvarez, reconoce que el contexto «es difícil» para muchas familias porque los tipos de interés seguirán subiendo, pero, «lo último que queremos tanto cliente como el banco es que tenga problemas con la hipoteca» por ello, se estudiarán soluciones para evitar los impagos.
Su homólogo en Caixabank, Gonzalo Gortázar, advertía que el Euribor acabará el año cerca del 3% y que el año que viene se mantendrá en ese entorno, lo que supone «una subida muy fuerte» que corresponde al fenómeno inflacionario que estamos viviendo. «No cabe duda que los hogares endeudados tendrán más cargas si hay una subida adicional en su hipoteca«, comentaba.
Pero, en su banco, explicaba, gran parte de la cartera hipotecaria es antigua y el 50% es a tipo fijo porque en los últimos años han priorizado estas contrataciones, (en el último año se han firmado el 90% a tipo fijo) por eso creen que el impacto en clientes será mínimo. Pese a ello, Caixabank se centrará en buscar soluciones, como las expuestas por el resto de bancos, para evitar que aumenten los impagos y la morosidad.