Arantxa Sánchez Vicario da marcha atrás en el desahucio de sus padres
La ex tenista solicitó este viernes la suspensión del juicio y abre una negociación extrajudicial
Arantxa Sánchez Vicario ha dado marcha atrás en el intento por desahuciar a sus padres del piso en el que residen en la avenida Diagonal en Barcelona y que es propiedad de la ex tenista. Sánchez Vicario solicitó el viernes pasado la suspensión del juicio, previsto para el jueves 27 de spetiembre, y solicitó a los abogados de sus padres la apertura de una negociación extrajudicial.
La suspensión del juicio es temporal (generalmente suele ser de unos 60 días). Expirado el plazo, los abogados de Arantxa podrían pedir su reactivación si no logran el acuerdo económico que pretenden. Los abogados de Arantxa ya habían intentado llegar a un acuerdo con los padres de la tenista antes de la publicación del libro en el cual Arantxa los acusaba de haberle robado buena parte de su fortuna.
El abogado de la excampeona española, Juan José Burgos, había solicitado a la familia 8 millones de euros para sellar la paz entre las partes, una petición que el matrimonio Sánchez-Vicario consideró irracional. “Los padres no tienen, ni de lejos, el dinero que pide”, comentaron fuentes cercanas a la familia a este diario.
Sin punto de partida
Hasta ahora, los abogados de Arantxa no han desvelado las exigencias que pondrán sobre la mesa en esta nueva negociación. La tenista ya sufrió un revés hace pocas semanas por otro juicio que ordenó abrir en Andorra y por el que acusaba a su padre y a su ex asesor Buenaventura Castellanos de apropiación indebida y administración desleal.
El juzgado de Andorra archivó la causa contra Castellanos y fuentes cercanas al caso dan por hecho que la jueza seguirá la misma vía en la acusación contra su padre, aquejado por cáncer y alzheimer.