Trabajo asedia a Amazon, Glovo y Deliveroo
Inspección de Trabajo centra su plan de choque contra el fraude en la contratación temporal y parcial en empresas como Amazon, Glovo y Deliveroo
Nueva ronda de inspecciones de Trabajo contra el fraude en la contratación en las plataformas online. Empresas de reparto de comida a domicilio como Glovo, Deliveroo o Uber Eats y marketplaces digitales como Amazon vuelven a ser el objetivo del Plan de Choque institucional para frenar el uso de contratos temporales o parciales irregulares y de la figura del falso autónomo.
De este modo, Trabajo está centrando su campaña contra los contratos irregulares en Glovo, Amazon o Deliveroo en las últimas semanas, según adelanta El Español. El diario digital señala que los inspectores cuentan desde el año pasado con la ayuda de una herramienta informática que conecta datos fiscales y de la Seguridad Social y que facilita la detección de los fraudes en la contratación que se puedan estar produciendo.
El objetivo de Trabajo es conocer las condiciones laborales de los trabajadores de las plataformas online y comprobar si se producen fraudes a la Seguridad Social
Una vez detectada una irregularidad, Trabajo envía una carta a la empresa señalada por la herramienta en la que se le insta a regularizar a sus empleados, para lo que cuentan con un plazo de un mes. Tras ese periodo, se realiza una nueva comprobación y, si vuelve a detectarse fraude, se inician los procesos para una sanción, según explica el medio online.
En cualquier caso, esta campaña contra el fraude laboral en la «gig economy» no es una novedad. A finales de julio, El País publicó que las plataformas de entrega de comida a domicilio estaban recibiendo la visita de los inspectores de Trabajo para comprobar que sus trabajadores estaban dados de alta en la Seguridad Social y no se estaba recurriendo a la figura del falso autónomo.
Plan de choque contra la explotación laboral
Esta ofensiva contra el fraude en la contratación forma parte de un plan de choque contra la explotación laboral que se puso en marcha en agosto de 2018. En principio, se enviaron cuestionarios y peticiones de documentación a las empresas para esclarecer la relación que mantenían con sus riders, lo que ha permitido aflorar cientos de casos de fraude laboral, a pesar de los intentos de camuflarlo por parte de algunas empresas.
Así, desde agosto de 2018 Trabajo ha detectado a 32.067 trabajadores que deberían haber sido inscritos en el régimen general por sus empresas, de lops que más de 8.000 se localizaron en el primer semestre de 2019 en las aplicaciones de reparto de comida a domicilio. Trabajo obligó a las plataformas a reconocer la relación laboral con sus empleados y a darles de alta ante la Seguridad Social.
Las maniobras de las plataformas para justificar que no existe una relación laboral con sus propios trabajadores no solo no convencen a los inspectores de Trabajo, sino que tampoco están teniendo demasiada fortuna con la justicia. Tribunales de Madrid, Barcelona, Valencia o Asturias han dictado sentencias que equiparan las condiciones de los riders a las de los asalariados y obligan a su contratación.
Notiicia original: Business Insider
Autor: Adrián Francisco Varela