Amazon gana la primera batalla legal contra Trump y Microsoft
El contrato, valorado en 10.000 millones de dólares (sobre 9.150 millones de euros), queda suspendido temporalmente hasta nueva orden del tribunal
Tras varios meses de polémica y cruces de acusaciones entre la Casa Blanca y Amazon, la compañía que dirige Jeff Bezos ha conseguido que un tribunal federal de EEUU estime su recurso para paralizar el multimillonario contrato con el Pentágono que se adjudicó en octubre pasado a Microsoft para desarrollar el proyecto JEDI.
La multinacional minorista recurrió a los tribunales con la intención de conseguir una orden judicial que impidiese a Microsoft comenzar a desarrollar el proyecto JEDI, que implica el desarrollo de una infraestructura en la nube para el Departamento de Defensa y su mantenimiento durante 10 años. El contrato está valorado en 10.000 millones de dólares (sobre 9.150 millones de euros) y Amazon asegura haber sido apartado indebidamente de su adjudicación.
La reclamación judicial presentada por Amazon alega que el presidente de EEUU Donald Trump presionó «de forma inapropiada» durante el proceso de licitación del proyecto para evitar que fuese adjudicado a Amazon Web Services, la filial cloud de la multinacional que dirige Jeff Bezos. Amazon ya anunció en noviembre que recurriría la licitación al considerar que había un «sesgo claro» en su contra y que su tecnología en la nube era «objetivamente superior» a la de sus competidores.
La jueza federal encargada del caso, Patricia Campbell-Smith, ha dejado el contrato en suspenso de forma temporal hasta nueva orden de los tribunales, aunque no se han pronunciado sobre la adjudicación en sí. Además, ha solicitado a Amazon que deposite 42 millones de dólares (unos 38,5 millones de euros) como fianza en concepto de daños y perjuicios en caso de que su reclamación sea desestimada, según adelanta la CNBC.
La paralización del Proyecto JEDI es un nuevo capítulo en el historial de desencuentros entre Donald Trump y Jeff Bezos, aunque, en vista del proceso judicial recién abierto, no será el último. De hecho, Amazon ha solicitado al Tribunal Federal de Reclamaciones que le permita interrogar al presidente, a su secretario de Defensa Mark Esper, a su predecedor, James Mattis, y a la directora de Información del Departamento de Defensa, Dana Deasy.
Con estos interrogatorios, Amazon busca demostrar que Trump tiene una inquina personal contra Bezos que le había llevado a socavar la candidatura de su compañía en la licitación del Pentágono. Como prueba de ello, ha solicitado interrogar al exsecretario de Defensa James Mattis, que ha desvelado en sus memorias que el presidente de EEUU le pidió «jugársela a Amazon» para echarles del proceso de adjudicación.
La prensa estadounidense se han hecho eco en los últimos meses del supuesto interés de Trump en interferir en la licitación del contrato JEDI. En agosto, 2 meses antes de que se decidiese la licitación, The Washington Post publicó que Trump había ordenado al Departamento de Defensa que revisasen el contrato ante la previsible adjudicación a Amazon. La Casa Blanca se defendió de estas acusaciones señalando que Jeff Bezos era el principal accionista del Washington Post.
Noticia original: Business Insider
Autor: Adrián Francisco Varela