Almirall acentĂșa la brecha salarial entre los trabajadores y el directivo de los ERE
La plantilla de la farmacéutica ha tenido el sueldo congelado durante buena parte de la crisis mientras su consejero delegado ha visto crecer su sueldo un 70% en tres años
En plena crisis, a mediados de 2011, Eduardo Sanchiz asumió el puesto de consejero delegado de Almirall. Jorge Gallardo no encontró su relevo en la familia y dejó el cargo, que simultaneaba con el de presidente, para un alto ejecutivo llegado a la compañía en 2004. El reto del entonces nuevo máximo ejecutivo era importante: superar la crisis y hacer crecer de nuevo el beneficio.
La farmacéutica se ha recuperado. Después de varios ajustes, contención salarial y venderse una parte importante del negocio, Almirall está creciendo en facturación, resultado recurrente y también en tamaño, con varias compras en 2015, como Poli Group y Thermigen.
El consejero delegado, premiado
El artífice de esta mejora, Eduardo Sanchiz, ha sido premiado. Su sueldo en 2015 subió el 20%, hasta los 1,939 millones de euros, gracias al incremento de los variables a corto plazo y de «otros conceptos» de su salario que la compañía no ha explicado en la documentación remitida a la CNMV.
Mirando los últimos tres años, el sueldo del consejero delegado de Almirall ha subido el 70%. En 2012, su primer año completo como máximo ejecutivo de la compañía, percibió 1,14 millones de euros, según los datos hechos públicos por la farmacéutica. Desde entonces, cada año ha visto subidas de dos dígitos, hasta rozar los dos millones.
Sólo el 1%
Mientras tanto, los empleados de Almirall no han disfrutado de las mismas ventajas que su consejero delegado. La plantilla se ha reducido considerablemente, con dos ERE y una venta, y la que queda ha vivido incrementos salariales muy pequeños.
La farmacéutica se rige por el convenio estatal del sector químico, aunque los salarios son bastante más altos que los mínimos de convenio gracias a la negociación colectiva en la empresa, según han explicado fuentes sindicales. De acuerdo con el convenio estatal, en 2013 y 2014 los salarios estuvieron congelados, y en 2015 sólo subieron el 1%. Para este año está previsto un incremento del 1,5%.
Cerrados a subidas salariales
Fuentes sindicales han explicado que si bien el sueldo de los trabajadores de Almirall es superior al de convenios gracias a pluses por objetivos, disponibilidad y otros criterios, no ha habido subidas por encima de convenio en los últimos años. «Si las ha habido, habrá sido en niveles retributivos altos, porque a nosotros no nos constan», han matizado.
De hecho, han explicado que el comité de empresa ha pedido en varias ocasiones subidas por encima de convenio, «pero siempre han estado muy cerrados» a concederlas.
Tres años de recortes
En los últimos cinco años, la compañía ha vivido varios procesos traumáticos, como dos expedientes de regulación de empleo o la venta de una parte importante de su negocio, la de respiratorios, a AstraZeneca. La plantilla se ha reducido de más de 3.300 personas a poco más de 2.000 durante la crisis.
A finales de 2013, Almirall anunció que despediría a 250 personas a causa de la caída de ventas, propiciada por los recortes en sanidad y del gasto farmacéutico. Finalmente, este expediente de regulación se quedó en unos 180 empleados.
Unos meses después, anunció la venta de su negocio respiratorio a AstraZeneca, que supuso el traspaso de más de 700 empleados a la compañía británica, aunque la producción se sigue haciendo desde la fábrica de Sant Andreu de la Barca. El último recorte, más reducido, lo hizo en 2015, cuando despidió a 59 personas de su área de investigación y desarrollo.
Centrado en dermatología
Después de estos ajustes, la farmacéutica se ha centrado en el crecimiento en dermatología y estética. En noviembre de 2015 anunció la compra de dos patentes de dermatología a GSK y, poco después, la de Poli Group, grupo con tres empresas en 70 países, con mucha penetración en el sector dermatológico.
El pasado mes de enero ejecutó la opción de compra que tenía sobre el 100% de la estadounidense Thermigen, compañía especializada en tecnología aplicada a la medicina estética.