Alierta y Sánchez Galán, principales ‘mecenas’ del Instituto Cervantes
El organismo ha cuadruplicado las pérdidas en el ejercicio de 2013 hasta los 19,1 millones de euros
“La pluma es la lengua de la mente”, decía Miguel de Cervantes en la célebre obra El ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha. Es una de las más destacadas de la historia de la literatura española. Y como no podía ser de otra forma, el nombre de autor es el que da nombre al Instituto Cervantes, el organismo público encargado de promover y enseñar, con la Ñ por bandera, la lengua española por todo el mapamundi. Pero cada vez más, con unas cuentas que en la novela bien podrían recordar a aquel famoso rocín flaco.
La institución cuadruplicó los números rojos en 2013, según los resultados que ha hecho públicos en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Las mismas cuentas en la que también quedan al descubierto las transferencias y subvenciones que el organismo recibió el año pasado. Y entre las aportaciones que obtuvo el Instituto, destacan las de dos empresas españolas: Telefónica e Iberdrola.
Repsol y Mahou también contribuyen
La compañía que preside César Alierta transfirió 300.000 euros en 2013, mientras que la Fundación de la eléctrica que lidera José Ignacio Sánchez Galán contribuyó en la actividad del organismo público con otros 70.000 euros. Pero no fueron las únicas privadas mecenas del Instituto. En las cuentas, también constan los nombres de la Fundación Repsol, que aportó 15.000 euros, así como el grupo Mahou, que le abonó 12.500 euros más.
Estas son las aportaciones suscritas en 2013 por compañías del sector privado. Pero el grosso de las transferencias y subvenciones provienen de las arcas públicas. Así, según la memoria publicada, el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, realizó una transferencia corri ente por importe superior a 48,1 millones de euros. A esa cifra se suman más de 2,5 millones en concepto de transferencia de capital.
Aportaciones de otros países
Además, el instituto Nacional de Administración Pública dio una subvención de más de 78.985 euros para “atender gastos de formación y perfeccionamiento del personal”, como indica el propio organismo público.
Pero el dinero también ha llegado de fuera. El centro de Chicago recibió una subvención del Estado de Illionus (Estados Unidos) por importe de 3.763 euros para la adquisición de fondos bibliográficos. El centro de Bremen (Alemania) fue subvencionado por el senado de la ciudad, por importe de 30.677 euros; el centro de Toulouse (Francia) recibió otros 15.000 euros procedentes del ayuntamiento galo y, por último, el centro de Manila (Filipinas) consiguió una subvención de 65.000 euros por parte del Ministerio de Educación del país.
Esta es solo uno de los múltiples puntos que dan muestra del estado de salud de las cuentas de Cervantes. En el último ejercicio, la entidad elevó a los 19,1 millones las pérdidas frente a los 4,5 millones que perdió en 2012. Además, el Instituto se anotó un resultado de operaciones –por las actividades que realiza– de 18 millones. Una suma que representa en torno al 21% de los ingresos.