Acciona celebra su junta de accionistas con el pago de impuestos de ATLL pendiente

Acciona celebra este jueves su junta anual de accionistas para pasar cuentas de un annus horribilis en el que ha visto como las reformas energéticas del Gobierno de Mariano Rajoy provocaban un impacto en sus cuentas de entre 160 y 170 millones de euros que intenta compensar con el plan de acción presentado el pasado 1 de mayo. La construcción de infraestructuras en España está en horas bajas y en la división de agua, su gran apuesta, quedarse con la gestión de Aigües Ter Llobregat (ATLL) en Catalunya por 50 años, ha acabado en los tribunales y existen dudas sobre si continuará en la gestión de la compañía.

Junto a su socio mayoritario, el banco de inversión brasileño BTG Pactual, desembolsó a finales de diciembre los 300 millones de euros que implicaba la firma del contrato. Eso sí, por el momento ha aplazado los 40 millones de euros a la Generalitat en concepto de impuestos asociados a la toma de control de la compañía, según informan fuentes conocedoras de la operación.

Incremento del negocio

Se trata de una cantidad pequeña si se compara con el montante total de esta operación, que compromete 1.000 millones de euros a lo largo de toda la concesión, o los 150 millones que pagaron para gestionar una desaladora de agua en Emiratos Árabes Unidos; pero que da más argumentos a la situación complicada a la que se ha llegado tras la privatización de ATLL.

Incorporar el contrato catalán ha significado que Acciona Agua incrementara su cartera de negocio el 132% hasta los 11.167 millones de euros en el primer trimestre de 2013 si se compara con el mismo periodo del año anterior.

Reducir las retribuciones

La cúpula de Acciona, presidida por José Manuel Entrecanales, ha propuesto a sus accionistas bajar el 11% su dividendo hasta los 2,65 euros brutos por acción. También pretende limitar las retribuciones de los consejeros de la compañía el 10%, que el año pasado percibieron 1,67 millones de euros.