La caída del tráfico por la inflación frena la recuperación de Abertis
La concesionaria de Atlantia y ACS gana 506 millones hasta septiembre, un 2% menos, tras un verano negativo en tráfico, ingresos y ebitda
Abertis obtuvo un beneficio neto de 506 millones de euros en los nueve primeros meses del año, 10 millones menos que en el mismo periodo del año anterior, según recoge ACS en sus cuentas trimestrales. Este descenso del 2% no es casual sino que es fruto de la caída del tráfico por la crisis provocada por subida del precio de la energía, las materias primas y, en especial, de los carburantes, que ha impactado de lleno en sus cuentas, sobre todo en el tercer trimestre.
La constructora que preside Florentino Pérez, que es el segundo accionista de Abertis con el 30% de las acciones, por detrás de Atlantia, destacó la subida de ventas de la concesionaria de autopistas que dirige José Aljaro, del 4%, hasta los 3.800 millones, y del ebitda, del 3,3%, hasta los 2.615 millones. Esas magnitudes fueron gracias a un crecimiento del 11,9% del tráfico respecto a los nueve primeros meses de 2021, que hasta compensó la pérdida de las concesiones de Acesa, Invicat y Sol.
No obstante, comparando los resultados hasta septiembre con los del primer semestre, se observa una clara ralentización. La subida del tráfico ha caído del 17,5% al 11,9%. Este descenso es especialmente significativo en España, donde pasa del 30% al 15,4%. En Francia, su primer mercado, pasa del 25% al 15,6%, mientras que en Italia pasa del 24% al 13,8% y en Chile, del 35% al 19,4%.
Esta caída se ha trasladado directamente a la cuenta de resultados. Los ingresos hasta junio subían un 7%, crecimiento que se ha reducido a casi la mitad tras el verano. La mejora del ebitda se ha ralentizado hasta un tercio de su ritmo, del 9% hasta el 3%.
Si la marcha de Abertis ha empeorado de junio a septiembre ha sido porque la evolución del negocio en los meses de verano ha sido negativo por primera vez en año y medio. Aunque no ofrece datos concretos, el tráfico ha bajado, lo que ha reducido los ingresos solo del tercer trimestre, un 0,6% (hasta los 1.373 millones), y el ebitda, un 5,9%, hasta los 918 millones.
Pese a este tercer trimestre, el conjunto del año es aun al alza y, de hecho, tanto la valoración de ACS como de la propia Abertis es positiva y el factor incertidumbre que afecta a la mayoría de sectores por la inflación no existe para sus gestores, que destacan el crecimiento del tráfico incluso respecto a 2019 y la mejora de prácticamente todas las magnitudes en lo que llevamos de 2022.
A nivel financiero, la salud de la participada de Atlantia, ACS y Hochtief no ha variado de forma significativa. La deuda neta se ha reducido ligeramente, aunque sigue siendo de más de 23.300 millones de euros, mientras que la caja ha crecido hasta los 4.051 millones, casi 400 millones más que a 30 de junio. Abertis, pues, está preparada para hacer inversiones.
La deuda y su coste, un riesgo al alza
Un riesgo que aflora en los resultados como consecuencia de la inflación, si bien no lo especifica, es el coste de la deuda. Es una compañía muy apalancada, cuyo endeudamiento era de 7 veces el ebitda a cierre de 2021. La subida de los tipos de interés en Europa, Estados Unidos y Reino Unido está encareciendo el crédito, por lo que este gran apalancamiento es ahora un riesgo porque toda refinanciación será más cara.
De hecho, en los últimos tres meses, el coste de la deuda de Abertis ya ha subido del 4,5% al 4,7% por encarecimientos en Chile, Brasil y México. La compañía que preside Marcelino Fernández Verdes destaca que en Francia, donde tiene el 70% de su deuda, su coste sigue estable, pero lo cierto es que en los próximos meses le vencen créditos por 2.200 millones entre el último trimestre y 2023.