Abertis demanda a la Generalitat por el fin de los peajes y pide una indemnización de 460 millones
Los peajes de las autopistas AP-7, AP-2, C-32 norte y C-33 quedaron sin servicio en septiembre del año pasado
Abertis ha presentado un recurso contencioso administrativo contra la Generalitat de Catalunya en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) para reclamar una indemnización de 460 millones de euros por el fin del contrato de gestión de las carreteras C31/C32 y la C33.
El grupo de infraestructuras ha optado por esta vía, después de que la negociación entre las dos partes haya fracasado, precisamente cuando se acaba de cumplir un año del levantamiento de peajes, según han indicado fuentes de la Generalitat.
Mientras que Abertis, controlada por la italiana Atlantia y ACS, pide 460 millones de euros a la Generalitat, el Govern considera que ya ha abonado la compensación adecuada, que cifra en 94 millones, tal y como ha avanzado El Economista.
La sociedad concesionaria de estas dos vías, Invicat, presentó esta liquidación final de 460 millones tras finalizar el contrato de concesión el 31 de agosto de 2021.
Tras realizar sus cuentas, el Govern autorizó el 21 de diciembre de 2021 al Departamento de Políticas Digitales y Territorio a pagar 94 millones en concepto de abono a cuenta por los saldos de compensación.
Las mismas fuentes de la Generalitat aseguran que ese pago se hizo efectivo el 18 de enero de 2022 y que el 7 de junio se acordó la liquidación económica final, sin que hubiera saldo pendiente alguno, por lo que ya se dio por abonada la compensación.
Levantamiento de peajes
Los peajes de las autopistas AP-7, AP-2, C-32 norte y C-33 quedaron sin servicio el 1 de septiembre de 2021, tras el fin de las concesiones a Acesa e Invicat, ambas empresas del grupo Abertis. Así, el Govern y la Generalitat comunicaron que invertirían 25,9 millones de euros para desmontar las playas de peajes de las autopistas, contando los peajes troncales y los ubicados en las diferentes salidas y entradas.
De este modo, la mayoría de kilómetros de autopista que eran de pago en Cataluña dejaron de serlo y solo quedaron unos 120 kilómetros con peajes explícitos. En concreto, el Túnel del Cadí (Lleida), el tramo Sant Cugat-Manresa (Barcelona) de la C-16, el tramo Castelldefels (Barcelona)-El Vendrell (Tarragona) de la C-32 y los Túneles de Vallvidrera (Barcelona).