»Va a haber más compras de la banca tradicional en el sector fintech»
Joel Vicient, fundador de Captio, repasa el presente y el futuro de las finanzas en el ecosistema digital, en una nueva edición de CeoTalks, el ciclo de charlas organizado por Delvy y patrocinado por Economía Digital Ideas
La historia de Captio no se entiende sin ir a su origen, en la pequeña localidad de Tortosa, provincia de Tarragona. Allí se gestó desde 2009 la idea de crear una plataforma para gestionar los gastos de los viajes de empresa de un modo automatizado, a través de una foto con el móvil. Hoy Captio cuenta con unos 300 clientes corporativos y procesa alrededor de cinco millones de documentos (facturas, tickets, etc.) al año, según los datos facilitados por la compañía.
Joel Vicient, fundador y cara visible del proyecto, fue el protagonista este lunes de una nueva edición de CeoTalks, el ciclo de charlas organizado por la firma de abogados Delvy y patrocinado por Economía Digital Ideas.
Vicient forma parte de ese grupo de jóvenes que, según apuntan algunas voces, pone de los nervios a Ana Patricia Botín, Francisco González y compañía. Herramientas como la de Captio, o la de jóvenes tecnológicas como Kantox o Fintonic, ofrecen soluciones a problemas que la banca tradicional no es capaz de tapar.
La innovación, en manos ajenas
Este joven directivo reconoce las dificultades de los Santander y Caixabank de turno para adaptarse al nuevo ecosistema digital («les cuesta innovar», subraya). Y por tanto ve lógica la política de adquisiciones que en los últimos tiempos han seguido estas compañías –especialmente activo en esta estrategia se ha mostrado el BBVA.
En este sentido, anticipa «en los próximos años» un reguero de compras por parte de los peces más grandes a los peces más chicos; jóvenes empresas que saquen la cabeza entre los miles de nuevos proyectos que atacan el campo de las finanzas. «Veo normal que la innovación se la dejen a otros», comenta.
El negocio está en el software
Con todo, y sin ánimo de superioridad alguno, Vicient marca cierta distancia con otras firmas del sector fintech. «Hay compañías que vienen a reemplazar a la banca tradicional. Nosotros no», sostiene. A diferencia de empresas como la mencionada Kantox –que ofrece a cualquier particular cambiar sus divisas con una comisión razonale–, Captio tiene un nicho de mercado más reducido (sobre todo, medianas y grandes empresas), aunque de una rentabilidad más inmediata.
En el fondo, esta compañía fundada oficialmente en 2012 centra todo su negocio en la venta de una herramienta en continuo desarrollo. El campo en el que se mueven, según el término anglosajón, es el de Software as a service (Software como servicio) o Saas, aunque enfocado en las finanzas de las compañías de las que son proveedores. «Tratamos directamente con los directores financieros», explica Vicient.
Próxima inyección extranjera
A pesar de que no revelan cifras de facturación, desde Captio aseguran que, además de España –donde cuentan con dos delegaciones, Barcelona y Madrid, además de la sede central en Tortosa—su foco hasta ahora ha estado también en Francia y Reino Unido. Algo que tiene sentido. La realidad de multinacionales como Telefónica, Oracle o Benetton –algunos de los nombres más ilustres de su portafolio—les exige tener presencia más allá de nuestras fronteras.
Con ese ánimo, esta compañía con 50 trabajadores en plantilla aspira a cerrar este mismo año dos nuevas rondas de financiación –en el pasado la apoyaron grupos inversores como Kibo Ventures o la estadounidense THCAP. La primera la liderará un fondo español, aunque se espera que la segunda, quizás cercana al doble dígito, llegue de fuera.
La intención, según reconoce Vicient, pasa por hacerse fuerte al norte de los Pirineos y también seguir creciendo en Latinoamérica, otra de las regiones donde ya ha tocado suelo Captio.