El tope del gas aparece en el recibo de la luz y genera nuevas dudas en los consumidores
Algunos clientes se encontrarán con un nuevo concepto en la factura; más trasparencia por parte de las empresas, pero más complejidad
El recibo de la luz tiene nuevo concepto. Por si no fuera lo suficiente complicada la factura de luz en los términos actuales, a partir de ahora los consumidores se enfrentarán también con los costes de la compensación del gas. Una cifra que saldrá indicada, aunque no es obligatoria.
Desde mediados de junio, más de 10 millones de españoles se enfrentan a un nuevo concepto en su recibo de la luz: la compensación del gas. Se trata de un concepto nuevo que hay que abonar debido a la entrada en vigor de la ‘excepción ibérica’. En estos momentos el precio del gas que entra en el mix energético, y que marca los precios mayoristas, está topado en 40 €/MWh. Sin embrago, las eléctricas cobran la totalidad del coste de compra de la materia prima. Y esa diferencia la paga el consumidor.
Por ahora solo lo pagan los clientes del mercado regulado (PVPC), así como los clientes que hayan renovado sus contratos del mercado libre. Y la gran novedad es que algunas compañías empiezan a reflejar este gasto en la factura, según explican desde la comercializadora independiente Gana Energía.
Se trata de una medida de carácter voluntario que algunas empresas van a utilizar con el objetivo de ofrecer mayor transparencia, aunque también es cierto que se trata de otro concepto, lo cual puede generar dudas entre los consumidores.
Una factura poco sencilla
Entre los conceptos que siguen complicando la vida de los usuarios hay que tener en cuenta la potencia que se tenga contratada, que determina cuántos electrodomésticos se pueden tener en funcionamiento al mismo tiempo sin que salten los plomos. Se debe tener en cuenta que este es un término fijo en la factura, que se paga independientemente del consumo que se realice.
Precisamente por esa naturaleza de coste fijo, es uno de los puntos en los que más se pueden reducir costes. Si nunca han saltado los plomos, aunque estén encendidos todos los aparatos y luces a la vez, es probable que se tenga una potencia eléctrica demasiado elevada y se esté pagando de más.
Otro de los principales conceptos es la energía consumida. Muestra el precio de cada kilovatio hora consumido y se factura en €/kWh. Varía en función del consumo que se realice. En caso de que se tenga contratada discriminación horaria, la energía consumida aparecerá desglosada en los tramos horarios existentes (Punta, Llano y Valle). En cambio, si se tiene una tarifa de luz 24 horas, aparecerá en un solo concepto en el desglose de la factura.
Y los impuestos
En los últimos meses se han producido varios cambios en materia impositiva dentro del marco de medidas del Gobierno para tratar de abaratar la factura de la luz. Por eso, muchos usuarios ahora no saben bien cuáles son los impuestos sobre la luz que pagan en su factura.
Desde el 1 de julio el IVA de la luz se fijó en un 5% para potencias inferiores a 10 kw. También se ha prorrogado la reducción del Impuesto Eléctrico, estando fijado ahora en el 0,5%. Por otro lado, los consumidores que se encuentren en el mercado libre encontrarán en su factura un pequeño importe que corresponde a la financiación del Bono Social. Además de estos conceptos más básicos, el usuario puede encontrar otra información de interés en su recibo. Por ejemplo, muchas compañías suelen incluir gráficos con la evolución del consumo de los últimos meses y el consumo medio diario.
Conocer cómo se realiza el consumo en el hogar puede ayudar a escoger mejor la tarifa de luz y adoptar medidas de ahorro. También se puede consultar, a través del código QR incluido en la factura, el Comparador de Ofertas de Luz y Gas de la CNMC. No obstante, tal y como ha contado ECONOMÍA DIGITAL, esta plataforma no funciona en estos momentos debido a los cambios que se están realizando a nivel regulatorio.