Los técnicos de Hacienda califican de «parche» la reducción del IVA de la luz
Gestha advierte de que la media "no se ha notado" en la factura de la luz y lo compara con la bajada del IVA.
El debate sobre el precio de la luz se ha avivado fuertemente desde el inicio del verano ante el repunte del precio de la electricidad en el mercado mayorista y, por ende, el encarecimiento del recibo de la luz en un momento aún de crisis para miles de familias tras el fuerte impacto de la crisis de la Covid-19 en el empleo y la facturación empresarial.
El Gobierno, sobre todo ante la presión de Unida Podemos, aprobó a finales de junio una rebaja hasta final de año del IVA de la luz del 21% al 10% y del impuesto de generación, sin embargo esta medida ha sido considerada por muchos expertos insuficiente para atajar el problema del elevado precio de la factura de la luz.
“Con este tipo de medidas no se ataca la raiz del problema, se hace un parche”, ha señalado en declaraciones a Economía Digital el secretario general del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), José María Mollinedo, quien realiza un símil con los “parches” que se han acometido en las últimas dos décadas en el sistema tributario.
Mollinedo ha comparado la bajada temporal del IVA de la luz con la bajada del IVA del cine aprobada por el anterior Gobierno del PP en el año 2018, sobre la que ya advirtieron de que serviría para aumentar el margen de las compañías pero no para rebajar el precio de las entradas.
«No se ha notado»
“Aquí ha pasado lo mismo, la bajada del IVA no se ha notado, se ha subsumido”, ha indicado Mollinedo, señalando que finalmente se ha transferido vía precios a las empresas energéticas productoras. Y es que lo cierto es que lejos de descender el precio de la electricidad en el mercado mayorista, conocido como ‘pool’ eléctrico’, ha ido incrementándose hasta cotas históricas este mes de agosto.
En este sentido, Mollinedo ha hecho hincapié en que el problema del precio de la electricidad no obedece al IVA, ya que hay países con un IVA alto o reducido y en el caso español se han registrado los picos del precio de electricidad ya con la bajada del IVA aprobada.
En este alza de los precios influye e manera directa el aumento en los precios de los derechos de CO2 y del gas, así como el repunte de la demanda como consecuencia de la ola de calor que ha sufrido España en las últimas semanas., lo que ha llevado al ‘pool’ a pulverizar récords superando los 117 euros por megavatio hora (MWh).
El peso del precio de la energía en el recibo de la luz es del 24%, frente a más del 50% que obedece a peajes (costes de distribución y transporte) y otros costes relativos a las renovables, extrapeninsulares y anualidades del déficit de tarifa. El resto corresponde a impuestos.
Prohibir operaciones especulativas de emisiones de CO2
A su juicio, el asunto del alto coste del recibo de la luz necesita una “mayor reflexión” y aboga por adoptar una medida similar a cuando en la pasada crisis la Autoridad Europea de Valores Financieros (ESMA) prohibió las operaciones en corto contra las acciones de empresas estratégicas.
Algo similar sucede con la energía, explica el secretario general de Gestha en referencia con el mercado de futuro de emisiones de CO2, mercado al que se ven abocados a acudir las empresas que necesitan adquirir CO2 y que está apostando al alza de los precios.
Por ello, desde Gestha plantean la suspensión temporal de las operaciones especulativas sobre las emisiones de CO2, de forma que no sea posible realizar este tipo de operaciones que acaban encareciendo el coste de la electricidad. Eso sí, considera que se debe de acordar a nivel europeo si el mejor momento cuando haya una tendencia alta en el valor del gas y se carezca de fuentes alternativas (eólica, solar o fotovoltaica) el sistema marginalista es el más adecuado.
Mediante ese sistema de corte de precio la última entrada por el que se fija el precio de la última energía que entra en el sistema cree que se producen “beneficios caídos del cielo”, algo que generan una “grandísima rentabilidad” a determinadas empresas pero “no es muy justo”, por lo que ve conveniente que se prohíban dichas operaciones en línea con medida adoptadas durante la pandemia, como el IVA cero adoptado para mascarillas durante la pandemia.
La bajada del IVA y del impuesto de generación
El real decreto-ley aprobado por el Gobierno a finales de junio con medidas coyunturales para abaratar el recibo de la luz redujo el IVA desde el 21% al 10% desde su entrada en vigor hasta el 31 de diciembre de 2021 a los consumidores con una potencia contratada inferior a 10 kW, siempre que el precio medio aritmético del mercado mayorista de la electricidad correspondiente al mes anterior al del último día del periodo de facturación haya superado los 45 euros por MWh.
Según el Gobierno, la rebaja del IVA permitirá reducir la factura a 27,7 millones de hogares, autónomos y empresas. La práctica totalidad de hogares se beneficiará de la reducción del impuesto indirecto. El tipo del 10% en el IVA se aplica con la medida también al 72,5% de los contratos de suministro de electricidad de empresas y negocios (no domésticos).
Asimismo, se aplicar un 10% de IVA a los consumidores vulnerables severos y en riesgo de exclusión social (50% de los beneficiarios del bono social) hasta final de año, con independencia de su potencia contratada y del precio del mercado, lo que beneficiará a más de 612.000 hogares.
La rebaja del IVA hasta el 31 de diciembre supondrá un ahorro para hogares, autónomos y empresas de 857,5 millones de euros, según cálculos del Gobierno, que señaló que el impacto presupuestario se dividirá entre este año y el próximo porque el IVA de los meses últimos del ejercicio se ingresará en 2022. En términos de caja, el impacto para este año se estima en 566 millones.
También suspendió entre julio y septiembre el Impuesto sobre el Valor de la Producción de Energía Eléctrica (IVPEE) tributo, con un impacto recaudatorio de 400 millones al suspender este tributo que grava con un 7% los ingresos obtenidos por la venta de la electricidad en el mercado mayorista y se repercute en el precio de dicho mercado y en la factura final.
A pesar del continuo alza de la factura, el Gobierno calcula que la rebaja del IVA supondrá un descenso de 6 euros al mes en la factura de un hogar medio, por lo que su aplicación permitirá un ahorro de 36 euros hasta final de año, mientras que la suspensión del IVPEE permitirá una rebaja de un 2% a un 3% en la factura de los hogares, de un 3% a un 6% para pymes y empresas medianas y alrededor de un 6% para la gran industria.
Podemos presiona al PSOE para abaratar el recibo
Desde Unidas Podemos lleva desde el inicio de la legislatura, entonces con Pablo iglesias al frente, y especialmente en los últimos meses realizando propuestas para intervenir el mercado con el fin de lograr abaratar el recibo de la luz ante los desorbitados precios.
Su última propuesta para ahorrar entre 1.500 y 3.200 millones a los consumidores pasa por el establecimiento de un precio fijo para la energía nuclear, en línea con lo que se hace ya en países como Francia. Las comercializadoras podrían adquirir la energía nuclear a este precio de referencia., de forma que, según Unidas Podemos, los consumidores quedarán protegidos frente a subidas en los costes de otras tecnologías que, con el sistema actual, se transfieren a la nuclear en forma de los conocidos como “beneficios caídos del cielo”.
Asimismo, insta al establecimiento de un máximo para la energía hidroeléctrica mediante un sistema similar al actualmente utilizado para algunas energías renovables, con el fin de que cuando el precio de otras energías, como el gas, sea muy elevado, éste no pueda encarecer el de otras energías más baratas como la hidroeléctrica. Y todo bajo la lupa de una auditoría de costes de generación a realizar por la CNMC.
El partido morado ya solicitó un fondo que financie “comunidades energéticas” para que los municipios puedan producir y distribuir energías limpias directamente y demanda la creación de una empresa pública de energía que controle los precios de la luz, una medida que el Gobierno sitúa en el medio plazo.