Suspensión de la pensión de jubilación parcial: qué es
La jubilación a tiempo parcial es aquella que se puede combinar con un contrato de trabajo a tiempo parcial de forma simultánea
La jubilación parcial hace referencia a aquella que se inicia después de cumplir los 60 años, de forma simultánea con un contrato de trabajo a tiempo parcial. También puede estar vinculada a un contrato de relevo con un trabajador en situación de desempleo o que tenga concertado con la empresa un contrato de duración determinada.
De esta manera, se pueden combinar los ingresos percibidos por el trabajo y, a la vez, cobrar la prestación por jubilación. No obstante, conviene tener en cuenta que la cuantía de la pensión se calcula aplicando el porcentaje de reducción de jornada al importe de la prestación que le correspondería, de acuerdo con los años de cotización que acreditados por el empleado.
Pueden acogerse a este tipo de jubilación los trabajadores por cuenta ajena, integrados en cualquier Régimen de la Seguridad Social. Además, es necesario cumplir con los requisitos exigidos para acceder a una pensión de jubilación contributiva.
¿Cuándo se suspende la pensión de jubilación parcial?
Cabe destacar que el cobro de la pensión de jubilación parcial es compatible con un trabajo a tiempo parcial en una empresa, anterior o posterior a la solicitud de la jubilación. Sin embargo, el principal motivo de suspensión del cobro de la prestación es el aumento de la jornada laboral. De manera que si se incrementa el número de horas trabajadas en cualquiera de estos casos, el cobro de la prestación se puede ver suspendido.
También es compatible con la pensión de viudedad y la prestación por desempleo. Sin embargo, no será compatible con la pensión de incapacidad permanente absoluta y gran invalidez, ni tampoco con la pensión de incapacidad permanente total para la actividad laboral contemplada en el trabajo que dio lugar a la jubilación parcial. Asimismo, tampoco será compatible con otra actividad laboral distinta a la realizada en el contrato a tiempo parcial.
Entre los distintos casos que pueden llevar la extinción de la pensión, figuran el fallecimiento del pensionista, el reconocimiento de una pensión de incapacidad permanente incompatible con la jubilación parcial, el reconocimiento de la jubilación ordinaria o anticipada o la extinción del contrato de trabajo a tiempo parcial.