La subida de la luz y las materias primas frena la recuperación de la gran empresa
La subida de los precios de la electricidad y de las materias prima está enfriando la recuperación de las grandes empresas al estancar sus ventas y moderar el aumento de su empleo al 4,6% en agosto.
La subida imparable del precio de la electricidad hasta máximos históricos y su consecuente repercusión en la inflación está repercutiendo en la economía de millones de hogares españoles y está afectando ya a la competitividad del tejido productivo español.
Cuando apenas inicia su reactivación tras la crisis de la Covid, las empresas se están viendo afectadas de pleno también por los mayores precios de materias primas y los problemas derivados de este encarecimiento en lo relativo al abastecimiento y las dificultades logísticas.
Este es el caso de la gran empresa española, a tenor de los últimos datos publicados por la Agencia. Tributaria, que refleja un estancamiento de las ventas frente a los aumentos que venía registrando desde el inicio de la recuperación en marzo.
Las ventas se estancan
En concreto, las ventas totales de las grandes empresas, deflactadas y corregidas de variaciones estacionales y de calendario, se incrementaron en agosto un 0,1%, estancándose respecto al repunte de julio (+1,7%) o junio (+7,8%).
La gran empresa acusa el impacto del aumento de los precios en sus ventas, y prolonga la moderación de meses anteriores tras las altas tasas de marzo (+10,1%), abril (+39%) y mayo (+22,6%) producto de la comparación con el periodo de confinamiento estricto del año pasado.
La comparación con 2019, en lugar de con 2020, da una idea más ajustada de la evolución que están siguiendo las ventas. Así, las ventas deflactadas y corregidas en agosto fueron un 4,8% inferiores a las del mismo mes de 2019, resultado mejor, eso sí, que el -5,3% que se promediaba hasta julio, según la AEAT.
Hacienda explica que en el dato del mes «vuelven a influir poderosamente los problemas que se detectan en algunas actividades concretas«, con tasas interanuales muy negativas, y la «incertidumbre que generan en el proceso de deflación las considerables subidas de precios» que se están registrando en los últimos meses.
Con todo, las ventas repuntan un 6,9% en los ocho primeros meses del año, frente al retroceso del 8,9% registrado en el conjunto de 2020 por la crisis de la Covid-19.
Caen las ventas interiores y las importaciones crecen más que las exportaciones
Dentro de las ventas totales, las ventas interiores acumulan un alza del 6,7%, por lo que aún le queda para compensar la caída del año pasado (-8,6%). De hecho, en agosto las ventas totales llegaron a ceder un 1,3%, frente a los aumentos de julio (+1,1%), junio (+7,1%) o las notables alzas de mayo (+23,1%) y abril (+38,3%).
Si se compara con 2019, el índice medio de las ventas interiores en el periodo enero-agosto fue un 5% inferior al de entonces. Por destinos, tanto en las ventas de bienes y servicios de consumo (-1,9%) como las de capital (-8,2%) experimentaron descensos.
Dentro de esta últimas, el retroceso de las de construcción (-11,5%) fue bastante más intenso que en el componente de equipo (-6,5%), y con gran influencia por fuertes incrementos en los precios en la obra civil.
Por su parte, las exportaciones mostraron un avance en agosto del 4,7%, aunque son todavía un 7% inferiores a los de 2019, mientras que las importaciones crecieron en mayor medida, un 9,2%.
El empleo se modera al 4,6%
Las consecuencias también se están notando en el empleo, ya que moderó su mejora al crecer un 4,6%, frente al 5,2% de julio o el 7,2% de junio. Lejos quedan también los repuntes de mayo (+11,4%) y abril (+12%).
El empleo en la gran empresa acumula un aumento del 3,3% en los seis primeros meses del año, pero aún no es suficiente para compensar el retroceso del 5,2% que sufrió en el año 2020 como consecuencia de la virulencia de la crisis, si bien es tan solo un 1% inferior al de agosto de 2019.
En lo que se refiere al incremento del rendimiento bruto medio, la AEAT explica que su evolución sigue alterada por los drásticos cambios en la composición sectorial del empleo que hubo en 2020, especialmente en los meses del verano, y su paulatina normalización en este año.
Según los últimos datos, los salarios en la gran empresa repuntaron un 0,4% en agosto, frente al estancamiento de julio y el avance del 0,1% de junio. Los datos acumulados apuntan a un alza del 1,1% de los salarios en lo que va de año, frente a la ligera subida de tres décimas en 2020, marcado por la pandemia.